A pesar de que cada vez generan mayor presión las pensiones y jubilaciones a los gobiernos municipales de todo el país, debido a que en la mayoría de los casos se fondean con gasto corriente, para el Ayuntamiento de Querétaro el gasto en este rubro no representa un foco rojo a corto plazo en materia financiera, señaló el Secretario de Finanzas, Francisco Martínez Domínguez.
En entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro, dijo que el municipio capitalino ha venido adoptando medidas para ajustarse a la reforma que se hizo a la ley estatal de pensiones en diciembre de 2015, que establece que el trabajador que se jubile deberá tener 60 años de edad y no bastarán 28 de servicio, como ocurría anteriormente.
Además el salario de retiro será el promedio de lo recibido en los últimos cinco años de trabajo y no el último sueldo; asimismo se fijó un tope de 42 mil pesos mensuales a la cantidad a recibir, debido a que la ley anterior no establecía límites.
Martínez Domínguez puntualizó que con la nueva ley el gobierno municipal capitalino disminuyó su presión financiera por el gasto que realiza en pensiones y jubilaciones, “ahora nuestro papel es estar atentos y vigilantes para que los trámites que se presenten de aquí en adelante cumplan con lo que establece la ley”.
Precisó que el gobierno municipal capitalino no cuenta con un fondo especial que atienda este rubro en especial, sino que se cubre a través de lo que se gasta por nómina, es decir por medio del gasto corriente.
“Por pensiones y jubilaciones, en el municipio de Querétaro gastamos 130 millones de pesos, cifra que es completamente manejable”.
La firma calificadora Standard & Poor's (S&P) dice que el sistema de pensiones del municipio de Querétaro no cuenta actualmente con recursos suficientes y podría presionar las finanzas del Municipio.
Los pasivos contingentes de Querétaro son bajos y están relacionados con algunas demandas legales, pago de las cuales no superaría el 2% de sus ingresos operativos.
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