Francisco Domínguez Servién, gobernador del estado de Querétaro, mostró su desacuerdo con el reporte de la Secretaría de Salud federal que advirtió que ocho entidades tienen riesgo de regresar al semáforo epidemiológico color rojo por el aumento en sus casos positivos de Covid-19.

Recordó que el aumento de casos confirmados en Querétaro responde a un incremento en la aplicación de pruebas por una búsqueda intencionada de portadores del virus, y que incluye la toma de muestras a personas asintomáticas.

“Nos ponen entre los ocho estados con más peligrosidad de mandarnos a semáforo rojo, hoy [ayer] sale esa alerta; yo no coincido en la positividad con la aritmética, simplemente hemos subido muchas pruebas”, indicó el mandatario estatal.

Insistió en que la estrategia del gobierno estatal está dando resultados, y se aplica por recomendación del Comité Técnico de Salud, por la pandemia de Covid-19, que está conformada por expertos y expertas en epidemiología, infectología y demás ciencias que respaldan de manera científica las decisiones del gobierno local.

Domínguez Servién dijo que regresar al semáforo rojo implicaría un desequilibrio en la recuperación económica, lo que sería desfavorable para el estado; por ello se mantuvieron los lineamientos del semáforo amarillo para Querétaro, pese a que la Federación colocó a la entidad en el semáforo naranja para el periodo comprendido del 12 al 25 de octubre.

“Imaginen que les digo ‘semáforo rojo, otra vez todos a encerrarnos’, ¿qué va a pasar? Otra vez a no tener un equilibrio justo entre la economía y la salud, hoy hay 72% de una cama con ventilador si fuera necesario; 73% de una cama con oxígeno sin ventilador si fuera necesario, pero no queremos que se ocupen, pero ahí están los resultados sino tendríamos saturados los hospitales del estado”, agregó el gobernador.

El pasado domingo, durante la conferencia vespertina para actualizar los datos de Covid a nivel federal, Ruy López Ridaura, director del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, informó que el estado tuvo un aumento de 35% en el número de casos en la última semana, aunque las defunciones sí disminuyeron en 68%.

De manera que es uno de los ocho estados de la República que registran un “rebrote” en el país y que están abonando a que la estadística también crezca en su curva epidemiológica, pese a que son al menos siete semanas de baja en la incidencia de casos a nivel nacional.

“Querétaro es de los estados que tiene una tendencia aún en aumento, tiene un aumento muy importante en la última semana de 35% es de los estados en donde este color naranja pueda aumentar a un riesgo mayor (a rojo) a pesar de que también [hay] un descenso en la última semana de menos de 68% en el número de defunciones”, informó.

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