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Francisco Domínguez Servién, gobernador del estado, pidió corresponsabilidad ciudadana para romper la cadena de contagio de Covid-19; el mandatario estatal reiteró el llamado para hacer esfuerzos conjuntos en una pandemia “que nadie pidió”.
Dijo que Querétaro atraviesa por el peor momento de la pandemia, y que es necesario que todos los habitantes del estado mantengan las medidas sanitarias. Lamentó las más de 2 mil 533 defunciones que se registraron hasta el lunes.
“Si no [tomamos medidas] no vamos a romper la cadena de contagio y tenemos en jaque a nuestros médicos y enfermeras todos los días, mañana, tarde y noche; este es un esfuerzo de todos, de toda la población, nadie quiso esto, nadie lo trajo, pero llevamos más de 10 meses con esta pandemia”, recordó.
En un mensaje dirigido a jóvenes de San Juan del Río, durante la entrega de infraestructura educativa, el gobernador pidió evitar las reuniones sociales; recordó que es necesario cortar la cadena de transmisión para superar esta etapa de transmisión del virus SARS-CoV-2.
“Estamos en el pico más difícil en Querétaro, arriba de 2 mil 500 fallecimientos que lamentamos mucho; personas que perdieron padres, madres, hijos, hermanas, hermanos, amigas, amigos que debemos lamentar muchísimo. Sólo el día de ayer [lunes], en un día, tuvimos 30 defunciones”, explico el gobernador.
Defunciones y presión hospitalaria, motivos del semáforo en rojo. En el análisis de la curva epidemiológica de Covid-19 para Querétaro, este martes el gobierno federal identificó un crecimiento acelerado en las defunciones y en las hospitalizaciones en el estado, motivo que empujó el regreso al semáforo rojo de riesgo epidemiológico de la federación.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, recordó que en los primeros días de diciembre hubo un descenso en los casos, para después repuntar en la segunda quincena del mes.
Desde entonces, los casos no han cedido, y con ello la presión hospitalaria y las defunciones han sido una constante; estos dos indicadores fueron los que incidieron para que el estado regresara al color rojo en el semáforo federal.
“En Querétaro, un rápido ascenso durante todo el otoño, pasa al semáforo rojo porque sus indicadores de mortalidad, principalmente, y la hospitalización van en fase de ascenso acelerado”, dijo.
El funcionario también informó que de las 233 mil 385 dosis que llegaron este martes al país, 2 mil 925 son para el estado de Querétaro; se trata de la tercera entrega para continuar con la protección del personal de salud.
En tanto, Martina Pérez Rendón, directora de Servicios de Salud, informó que la ocupación hospitalaria llegó al 61% de camas generales; la funcionaria se sumó al llamado para que la ciudadanía mantenga las medidas sanitarias, principalmente a salir sólo a lo estrictamente necesario.
La pandemia, en la actualidad para Querétaro, no sólo ha generado aumento de hospitalizaciones y defunciones, sino también una saturación en los servicios funerarios; por ello es que, desde el 13 de enero, las familias ya también tienen la opción de la inhumación para agilizar la disposición de los cadáveres.