Este año se acaban de cumplir 800 años en que se realiza la representación del nacimiento de Jesús, idea abordada según varios textos por Francisco de Asís, en Greccio, Italia, a quien se le tiene catalogado de manera iconográfica como el santo relacionado con la humildad y la pobreza y quien haría esta representación del pesebre con los animales y la gente del pueblo que ponemos de manera natural en nuestro árbol de Navidad para junto con las familias franciscanas recordar los momentos más significativos de la última etapa de la vida de San Francisco.

San Francisco, utilizaba esta idea del pesebre para darle un ambiente parecido al nacimiento de Jesús, el cual fue inspirado mientras pasaba por unas grutas que vio en Tierra Santa y se dice se le asemejan a lo que había visualizado sería el nacimiento de Jesús, de ahí que María, Jesús y el niño Jesús, así como la presencia de un ángel, las ovejas, los pastores, la mula, un buey, y una estrella, -en algunas epifanías incluyen a los tres Reyes Magos-, sean los personajes que tenemos cada año para poner debajo de nuestro arbolito.

Michelangelo Merisi, mejor conocido como Caravaggio, pintor revolucionario italiano, mago del claroscuro y maestro del tenebrismo y del realismo, así como máximo exponente del arte barroco, realizó en 1609, la “Natividad con San Francisco de Asís y San Lorenzo. En esta obra de arte se puede apreciar a la Sagrada Familia, con un halo tétrico, algo muy al estilo del maestro, ya que se muestran todos los personajes en un estado melancólico, tal vez hasta con un toque de incredulidad al mirar al niño Dios de un modo tal vez lejano y hasta cierto punto apático. Tal vez esto tiene que ver al saber que Caravaggio, era una persona de un carácter un poco agria y era un poco crédulo de los temas religiosos, o bien porque sus modelos los sacaba de personajes que veía en las calles, incluidas las prostitutas que encontraba en su camino, pero lo verdaderamente increíble es que eso no bastara para que este cuadro o mejor dicho esta “obra de arte” fuera robada del oratorio de San Lorenzo de Palermo en el año de 1609 y misma que a la fecha no ha sido encontrada, solo encontraron un marco vacío, sin la obra del maestro Caravaggio, han existido distintas historias sobre su paradero, entre ellas que la mafia tuvo que ver des del comienzo y hasta 1980 se dejó de decir esto, otras versiones más recientes (2017), han dicho que fue mordida por ratas y luego quemada, otras más (2020), que se vendió en el mercado clandestino, pero la realidad es que con todo y todo aun en el libro de Ricardo Lo Verso, “El lienzo de los patrones”, lo verdaderamente cierto es que de esa obra no se ha vuelto a saber nada concretamente, aun y con todo y el documental que sacaron las autoridad italianas, en el 2016.

Otro de los artistas que también pinta este tema es, Sandro Botticelli, él fue uno de los artistas renacentistas más destacados, realiza esta representación del nacimiento con su obra “Natividad Mística”, por ahí del año 1501, nos muestra una visión de los acontecimientos religiosos basados en las profecías del Apocalipsis, con una perspectiva distinta a la iconografía clásica de lo que representa la Natividad, esta obra la podemos ver en la National Gallery de Londres.

Sin importar la versión belenística que sea de tu agrado, podemos decir que podemos disfrutar desde el año de 1223 de esta idea que aborda San Francisco de Asís sobre lo que puede ser la “alegría perfecta” en estas fechas.

Google News

[Publicidad]