Regularmente cuando llega el mes de septiembre, en nuestro país existe la afamada campaña de descuentos para realizar el testamento y de alguna manera dejar todo en orden, como diríamos elegantemente, en caso de que “partiéramos a nuestro último viaje”. Pero más allá de las cosas materiales que imaginemos un viajero pudiese dejar de herencia, como maletas, los teléfonos celulares, la preciada cámara 360, el lente gran angular o una gopro,  un dron, tripie, y quizá una gama de viajes pendientes, te imaginas que te pudiera heredar su ¿gen viajero? Así como lo leen, existe un gen llamado DRD4-7R que es el responsable de que el 20% de la población mundial tenga su pasaporte en mano y con fecha de validez para poder viajar en la más mínima oportunidad, realmente se escucha absurdo, pero no lo digo yo, científicos de gran calado estudian las pistas que desvelan las claves de esa curiosidad e impulso desbordante en algunas personas por conocer cada rincón del globo terráqueo. En específico de ese 20% que lo posee, realmente el  10% lo pone a funcionar, claro, puede ser que el otro porcentaje lo ocupe en otras actividades, en este caso a lo que nos atañe. Según el Diario Oficial del Comportamiento Humano este gen, que quizá muchos no conocíamos, está en nuestro ADN y desde luego, se puede heredar. Según los expertos este gen es más común que se presente en personas descendientes de corrientes migratorias, por ejemplo, aquellas que llegaron de África 50.000 o 70.000 años atrás. El DRD4 está ligado a la motivación y al comportamiento  y la variante 7R es la promotora de la inquietud y curiosidad.

Quien los tiene en conjunto, por su puesto, “hace una bonita combinación” que lo impulsa a explorar e incluso a asumir riesgos, más que el 80% de la población restante. Sin embargo, cabe resaltar que este gen no sólo motiva nuestra inquietud y curiosidad sino que, efectivamente, según palabras de David Dobbs de National Geographic, está estrechamente vinculado a la pasión por viajar, explorar lugares, tener mejores ideas, probar nuevas comidas, hacer más relaciones e intentar cosas que quizá muchos no harían, son quienes aceptan el movimiento, se adaptan a cualquier circunstancia, cambio o aventura.

Regresamos a lo material, algunos aventureros trotamundos, “aunque usted no lo crea”, buscan la oportunidad de hacer negocios en su propio país o en otras partes del mundo, algunos de ellos tienen departamentos para renta de Airbnb en destinos paradisíacos, automóviles para renta o traslados en tour operadoras, flota de autos en Didi, Uber o Cabify, renta de kayaks o scooters. Además, ¿sabías que las redes sociales se pueden heredar y que  muchas de estas son monetizadas? Algunas redes sociales, como Facebook, ofrecen la opción de dejar instrucciones en caso de fallecer, una de ellas es hacer una cuenta conmemorativa “en memoria de”, y la otra es dejar un administrador total, desde luego tema posterior.

Departamentos para renta de Airbnb, glampings, motocicletas, renta de scooters, heredar redes sociales monetizadas, viajes en puerta, en fin, las apariencias engañan, y para los que piensan que algunos viajeros,  como diríamos coloquialmente “no tienen en qué caerse muertos”, al menos si eres familiar, podrían heredarte su DRD4-7R. Déjame saber qué opinas tú al respecto.

*Periodista y conductora
Premio Internacional de Periodismo Turístico 2022
Otorgado por la OMPT 
Twitter @NatividadSanche
Facebook.com/NatividadSánchezB

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