Para “puentes”, los de México y no precisamente los de las vialidades, sino los vacacionales, para eso los mexicanos nos pintamos solos. Pues con decir que este año se añadieron dos días más de descanso obligatorio en el sector formal, quedando en nueve, de acuerdo con lo dictado por la Ley Federal del Trabajo, todo está dicho, dos días más que el año pasado. Y es que no me dejarán mentir que aunque no tengamos hijos, checamos el calendario escolar sólo para revisar los días de descanso oficial, vacaciones, festivos, semana santa, semana de pascua y uno que otro “puente” que podremos aprovechar para escapar de la rutina.

Este mes de marzo trajo consigo un ansiado descanso que merecido o no, la mayoría tomará, y que, por si fuera poco, casi de inmediato iniciarán las vacaciones de Semana Santa y Semana de Pascua, periodo que abarca desde el 25 de marzo y hasta el 5 de abril. Para este megapuente, la Secretaría de Turismo a nivel federal indicó que se obtendrá una ganancia de 48,381 millones de pesos y una llegada de 1.64 millones de turistas a hoteles.

Pero, alguna vez se han preguntado cuál es el origen del amado y bendecido puente vacacional que muchos esperan con tanto frenesí. Como todos sabemos, a lo largo del año, y en el mundo entero, existen días de descanso obligatorios establecidos por la ley, como el Día de Martín Luther King en Estados Unidos, el Día de los Presidentes o el Memorial Day, el Día de la Hispanidad en Barcelona o las Fiestas de Songkran en Tailandia, en fin, hay muchísimos y no acabaríamos de enlistarlos. Pero ustedes saben que México es un caso aparte, aquí aprovechamos absolutamente todo y no se nos podían escapar estas fechas para dejar un poco de lado el trabajo, luego de que además aún se encuentre entre el ranking de los países que menos vacaciones tiene comparado con Alemania, con 20 días; España, con 22; Austria, Dinamarca, Suecia y Noruega, con 25; Francia y Finlandia, con 30 días. Lo crean o no, esto lleva ya un buen tiempo, fue en agosto de 1859 cuando el presidente Benito Juárez en ese entonces expidió la ley sobre días festivos y civiles, en la que detallaba los días que se considerarían festivos prohibiendo la asistencia a las funciones de la iglesia, de ahí en adelante se han derogado leyes, modificado circulares y disposiciones, como diríamos en la actualidad, de esta “bonita costumbre”.

Para aquellos que se preguntan cuál es el siguiente descanso, continuamos con el 1 de mayo, Día del Trabajo, sigue el 2 de junio por la jornada electoral, el lunes 16 de septiembre con el aniversario de la Independencia, 1 de octubre debido a la transición del poder Ejecutivo, el 18 de noviembre por la Revolución Mexicana y el 25 de diciembre, Navidad.

Queridos lectores, a todo esto súmenle que a los mexicanos nos encanta inventar fechas para festejar, que oficial o no, muchos piden permiso para faltar o, mejor, piden perdón al regresar. Pues no hay de otra, no nos queda más que disfrutar. ¡Feliz y descansado megapuente vacacional!

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