Mal, mal, mal, así van los priístas en nuestro estado, después de una imposición en la dirigencia estatal al colocar ahí a un hombre con una poco y fracasada trayectoria política, el PRI Querétaro sigue dando muestras de incongruencia, de doble moral y discurso al tratar de imponer en sus estructuras a personas de cuya trayectoria son asombrados los mismos integrantes del partido.

Esta vez corresponde al Organismo Nacional de Mujeres Priístas (ONMPRI) ser una protagonista más del dedazo partidario al perfilar como únicas aspirantes a la dirigencia estatal a dos mujeres enciclopédicamente ignorantes en el tema de género, cuyos logros en política se han consolidado por ser las “modelitos en turno” de los presidentes y dirigentes del partido, denigrando así el trabajo político de las mujeres en general. Como miembro del Revolucionario Institucional me da vergüenza que las y los ciudadanos piensen que así somos todas las mujeres que integramos el partido. Es una realidad que existen mejores propuestas para la dirigencia de dicho organismo, cuyo último fin es fomentar el liderazgo y la participación de las mujeres en la vida pública.

En Querétaro, este organismo para lo único loable que ha servido es para dejar a las amantes, las novias de un rato y las juanitas que ha procreado, dejando a un lado a las mujeres que han consolidado su trabajo y estructuras ahí donde la humanidad sufre. El PRI debería entender que después de una magna derrota no está para cometer errores y dar saltos al pasado y al vacío, pero vamos, como militantes de y como sociedad entendemos que ese es el rol que juega el PRI: premiar a quien patea el pesebre, premiar a la ignorancia y a la indiferencia, premiar a las y los corruptos, dejar a un lado a su juventud renovadora y seguir destruyendo a la sociedad y al país.

El ONMPRI debería ser catapulta para los liderazgos del partido pero mientras tengamos a una Abigail Arredondo, perdedora por antonomasia, y a una Josefina Meza, corrupta, defraudadora y lucradora del género, jamás podremos hablar de mujeres priístas que busquen generar una verdadera equidad y paridad de género. Aclarando que todo lo aquí escrito puede ser defendido en cualquier tribunal, no sólo por mujeres militantes del partido, sino también por mujeres de otros partidos y de la sociedad, que justamente en pocos días será dado a conocer.

El ONMPRI en sus estatutos establece como principio básico la democracia directiva, por lo que convoco a las mujeres priístas a unir esfuerzos y luchar contra una imposición tan denigrante como las aquí ya mencionadas, pues sería una lástima que mujeres tan ignorantes, misóginas y retrógradas fueran las que representen a esta comunidad de mujeres priístas que sí trabajan por su pueblo, por su comunidad y sobre todo por su género. Aprovecho también para proponer al Consejo Político Estatal y a su dirigencia estatal, que recuerden que según los estatutos este debería regir su vida interna de manera democrática, sí democrática (palabra que desconoce el partido), por lo cuál deberían convocar a su militancia a una verdadera elección, para que las mujeres priístas dejemos de ser las aplaudidoras, los tapetes de los patriarcas, las sumisas y la vergüenza de muchas mexicanas. Es tiempo de levantar la voz por una sola causa: el género, aunque le duela a los patriarcas e impositores del partido… ¡Que viva la democracia, que vivan las mujeres y fin a las y los impostores priístas, el cáncer de México!...

Oradora Nacional.

Premio Estatal de la Juventud Querétaro 2013.

@MadalyrmDavila

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