La Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), adoptada por las Naciones Unidas en 1979 y ratificada por México el 23 de marzo de 1981, es el tratado de derechos humanos más importante para las mujeres del planeta.

Los objetivos de la CEDAW incluyen eliminar toda forma de discriminación contra las mujeres en todos los ámbitos de la vida y garantizar el pleno desarrollo y avance de las mujeres para que puedan ejercer y disfrutar de sus derechos humanos y libertades fundamentales de la misma manera que los hombres. Los Estados parte deben informar su progreso a intervalos regulares y permitir que el Comité de la CEDAW examine las acciones realizadas. El Comité de la CEDAW, integrado por 23 expertas en derechos humanos de las mujeres provenientes de diversas partes del mundo, es responsables de supervisar la aplicación de la Convención y los avances alcanzados por los Estados.

En el X Informe periódico ante el Comité de la CEDAW presentado por Citlalli Hernández el 17 y 18 de junio en Suiza, el gobierno de México destacó, entre los logros alcanzados, la creación de la Secretaría de las Mujeres y las reformas constitucionales en materia de igualdad sustantiva, derecho a una vida libre de violencia de las mujeres, paridad en todo e igualdad salarial. También incluyó los Programas para el Bienestar, incluidas la pensión de las personas adultas mayores y la pensión para mujeres, la creación de la Cartilla de Derechos de las Mujeres, del Sistema Nacional y Progresivo de Cuidados y la construcción de 200 Centros de Educación y Cuidado Infantil.

Por otro lado, organizaciones civiles como el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio y la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos «Todos los Derechos para Todas y Todos», señalaron la falta de cumplimiento de las recomendaciones hechas por el Comité a México así como la actitud triunfalista de la delegación mexicana, que presento datos parciales para ocultar al Comité la falta avances significativos para atender la discriminación estructural y la epidemia de violencia que aqueja a las mujeres y niñas de México, especialmente en materia de feminicidio, desaparición y explotación sexual.

Por su parte, el Comité felicitó a México por la elección de la primera mujer Presidenta de su historia y reconoció la adopción de una Política Exterior Feminista. Sin embargo, cuestionó la falta de evidencia concreta y de datos estadísticos confiables que demuestren los avances reportados por el Estado mexicano, lo que dificulta evaluar el impacto real de las políticas públicas implementadas por el gobierno de nuestro país en la vida de mujeres y niñas. Además, el Comité expresó su preocupación por la militarización del territorio y por la falta de información sobre quién absorberá las funciones de la CONAVIM, responsable del seguimiento de las Alertas de Violencia de Género.

Ante el Comité de la CEDAW, México quedó reprobado.

Titular de Aliadas Incidencia Estratégica e integrante de la Red Nacional de Alertistas.

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