En un contexto que no siempre muestra su rostro más amable me da mucho gusto compartir acerca de un arte marcial judío que lleva por nombre Krav Magá, y que justo está basado en los principios de saber controlar nuestra mente y emociones para que sin el uso indebido de la violencia o abuso de poder logremos nuestras metas, lo cual siempre es un aliciente.

Les comparto la buena nueva, estimados lectores, que en la semana del 5 al 9 de agosto, Querétaro recibió al Grand Máster de este arte marcial, Yaron Lichtenstein, quien vino a nuestra ciudad a dar a conocer más sobre su disciplina, vivencias personales y anécdotas que lo han llevado al triunfo. Pero, sobre todo, vino a certificar a los alumnos seguidores del Krav Magá, ya que es la única personalidad acreditada para poder realizarlo.

El Krav Magá es una escuela de artes marciales israelíes cuya historia nos remite a los valores del ser humano. Su historia se remonta al año de 1977 cuando un hombre llamado Yaron Lichtenstein, su representante actual e internacional, recibió las llaves de la Academia en Tel-Aviv y posteriormente fundó la Academia Bukan en la ciudad de Rehovot. Krav Magá

Se pensó en el apelativo de bukan, para hacer referencia a la espada de madera utilizada por los antiguos guerreros samurai, en lugar de la espada de verdad. El simbolismo tiene su meta en jamás cortar la cabeza del amigo. En idioma japonés, bukan significa, el salón del guerrero.

La práctica del Krav Magá, además de cultivar nuestro cuerpo, mente y espíritu, también enseña valores que son excelentes aliados de nuestro diario vivir, como, por ejemplo: armonizarnos con nuestro propio ser, cómo proyectar más confianza en nosotros mismos y la manera de sobrevivir a las situaciones más peligrosas.

A los estudiantes de esta disciplina se les conduce por niveles desde principiante hasta avanzado, se otorgan colores distintivos que van en la secuencia: cinta amarilla, naranja, verde, azul, marrón y negra.

Cabe destacar que la sede de la acreditación que les platicaba, fue la Academia de Krav Magá y en la cual se imparte toda esta filosofía de vida tan interesante.

Si soy honesta, yo ya me motivé con estudiar todo esto. Así que quienes se encuentren interesados pueden acudir a la Academia o comunicarse al siguiente teléfono 216 40 98.

Siempre es una buena oportunidad para caminar en el sendero de la mejora continua y abonar a nuestra persona un tiempo para ser mejores.

Saludos y que tengan una fructífera y plena semana.

Periodista y presidenta de Fundación ARCA, A.C.

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