A las 11:00 horas en punto, de este martes 19 de septiembre de 2023, todo el movimiento en las oficinas de gobierno se detiene. Suena la alarma sísmica.
Un temblor de 8 grados en la escala de Richter se acaba de registrar en las costas de Guerrero, hay que desalojar los inmuebles. Esa es la hipótesis utilizada para el macrosimulacro que se lleva a cabo en conmemoración de los sismos de 1985 y 2017 ocurridos en México.
Como en años anteriores, las dependencias de gobierno se suman a esta acción. Los burócratas del estado son advertidos de que se realizará este ejercicio para estar preparados en caso de una emergencia.
Aunque en Querétaro los sismos no se sienten con intensidad, sí se han llegado a percibir, como fue el caso del ocurrido el 19 de septiembre de 2017.
Dando las 11:00 horas salen de sus oficinas. Algunos dicen que la alarma sonó poco antes de la hora pactada. Dada la señal, todos abandonan sus oficinas y comienzan a llenar Plaza de Armas. Cada dependencia, con sus coordinadores, ocupa un espacio en el lugar. No se mezclan entre oficinas. Es parte de las indicaciones, guardar cierto orden para identificar a quienes trabajan en las diferentes dependencias y se tenga un conteo exacto del personal.
En los inmuebles que no son de gobierno también las actividades se detienen por unos minutos. Restaurantes aledaños permanecen con sus comensales en las mesas, quienes observan el movimiento. Otros ciudadanos permanecen en las bancas de Plaza de Armas, viendo la movilización de los empleados de gobierno y viendo como los edificios son desalojados.
Tras unos minutos, todos los trabajadores están en Plaza de Armas. Permanecen formados bajo el sol matinal que cada vez se hace más intenso. Algunos usan alguna prenda de vestir para cubrirse la cabeza de los rayos del sol. Otros, tienen más suerte y están bajo las copas de los árboles.
Dos unidades de la Coordinación Estatal de Protección Civil llegan a la calle de Pasteur. Se instala un centro de mando, donde se conocen las cifras y el saldo del simulacro.
A lo lejos se escuchan las sirenas de los bomberos. Los camiones rojos de este heroico cuerpo se acercan a Plaza de Armas. Se estacionan a un costado del Palacio de Gobierno. Los elementos descienden y preparan todo su equipo.
La hipótesis es que hay un derrumbe y presencia de fuego, dice uno de los bomberos, mientras sus compañeros se preparan para ingresar al recinto. Los acompañan los integrantes de las brigadas de Protección Civil de Palacio de Gobierno. Tras unos minutos de revisión de las instalaciones, los bomberos salen del edificio.
Afuera, el coordinador estatal de Protección Civil, Javier Amaya Torres, dice que fueron 13 dependencias, en la zona centro, las que participaron en el simulacro del terremoto de 8 grados Richter, con epicentro en Acaulco, Guerrero.
“Se desalojaron mil 500 personas, con un tiempo de seis minutos. Esto es un tiempo excelente para un desalojo de esa cantidad de gente. A nivel estatal participaron 861 mil 995 personas, en un total de 2 mil 277 inmuebles en el estado”, precisa Amaya Torres.
Agrega que no se puede decir que se festeje el Día de Protección Civil. Lamentablemente Protección Civil en México, recuerda, nació a través de una tragedia, en 1985, y luego en 2017 volvió a recordar que hay que estar preparados.
“Es primordial que toda la sociedad esté preparada para estos eventos que no estamos esperando. La preparación, este tipo de ejercicio son los que nos ayudan a salvar vidas, a que todos estemos preparados para lo peor, pero siempre pensando en lo mejor”, indica.
El secretario Particular, Josué Guerrero Trápala, precisa que “esto tiene que ser un recordatorio para todos nosotros a estar preparados y es siempre importante seguir las indicaciones de las autoridades, en este caso de los especialistas en Protección Civil”, dijo.
Ante del simulacro, en las instalaciones de la Coordinación Estatal de Protección Civil, se realizó una ceremonia conmemorativa al Día Nacional de Protección Civil, en donde el titular estatal señala que en este día se recuerda a las víctimas de dos de los peores sismos que han ocurrido en México: el de 1985 y el de 2017; además de rendir homenaje a las personas e instituciones dedicadas a brindar asistencia para salvaguardar la integridad de la población.
En cuanto al cuerpo de Bomberos, dice Sergio Ortiz Trejo, subdirector operativo de Bomberos Querétaro, participaron tres unidades: una de rescate, una de extinción, así como la del jefe de Batallón.
Comenta que el personal que participa en dicho ejercicio está capacitado para actuar en este tipo de emergencias y se activa el protocolo que corresponde.
“El llamado que nos hicieron fue por incendio en una estructura. Entonces, en estos casos, se despacha personal de rescate, personal de extinción, y un jefe Batallón”, añade.
También formaron parte del ejercicio elementos de la Cruz Roja de Querétaro, así como de la Policía Estatal.
Concluido el simulacro, los burócratas regresan a sus respectivas oficinas.
Fueron casi 25 minutos los que permanecieron en la Plaza de Armas. Una vez más se ha cumplido con el protocolo de cada año en esta fecha.