En el estado de Guanajuato todos los establecimientos de alimentos tienen prohibido colocar saleros en las mesas de los comensales y de ponerlos al alcance del público, de acuerdo a las disposiciones de un decreto de Ley vigente desde el martes pasado.

La norma tiene un propósito preventivo en materia de salud, a efecto de evitar problemas cardiovasculares por la ingesta excesiva de sodio.

Todos los restaurantes, negocios, puestos de comida, establecimientos de hospedaje y hasta los taqueros deberán están obligados a retirar los saleros de sus negocios de acuerdo a las disposiciones de la Ley de Salud del estado; además, deberán contar con agua potable gratuita para los clientes que la requieran.

Los establecimientos deberán retirar de las mesas la sal común y colocarla sólo a petición de los consumidores.

El secretario de Salud del estado, Daniel Díaz Martínez, informó que se harán notificaciones a los negocios que expenden alimentos para que acaten las nuevas disposiciones en sus protocolos de operación, y que compartan la información a su personal.

Dijo que los prestadores que no retiren los saleros serían sancionados hasta con la suspensión de actividades.

El diputado Jaime Hernández Centeno, de Movimiento Ciudadano, impulsó la Ley de Salud del Estado de Guanajuato para implementar medidas que disminuyan y prevengan el incremento de enfermedades cardiovasculares y la diabetes.

La enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo y la mayoría de éstas pueden prevenirse actuando sobre factores de riesgo, como el cese del consumo del tabaco, la reducción de la sal en la dieta, el consumo de frutas y hortalizas, la actividad física regular y evitar el consumo nocivo de alcohol, dijo el legislador.

“La atención clínica de enfermedades cardiovasculares y diabetes es costosa y prolongada. El costo humano, social y presupuestal puede reducirse en gran medida con sencillas acciones cotidianas, por ejemplo que los establecimientos ofrezcan agua potable sin costo a los clientes que lo soliciten y retiren los saleros de las mesas, llevándolos sólo a solicitud del consumidor”, expuso.

La medida de poner agua potable contribuirá a desmotivar la ingesta de bebidas azucaradas.

El legislador argumentó que, en México, la cifra de muertes por enfermedades derivadas del consumo de bebidas endulzadas es alarmante; de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el 2016 se registraron 23 mil 100 muertes de hombres y 22 mil en mujeres de entre 30 y 69 años.

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