En el Centro Histórico de Querétaro existen alrededor de 750 establecimientos con licencia de alcohol, pero no todos generan ruido, aseguró el presidente de la Asociación de Empresarios Turísticos, Ricardo Veraza Peñaloza.

Reconoció que el control del volumen de la música de los lugares y la existencia de empresarios que no respetan los reglamentos de funcionamiento es una problemática y algunas veces se transgrede la tranquilidad de los vecinos.

Peñaloza informó que ya se reunieron con asociaciones de colonos para nivelar la contaminación por ruido. Dijo que las reuniones tienen el interés de escuchar las inquietudes y arreglar la problemática para evitar afectaciones.

Por parte de los representados en la asociación, hay el interés de regularse y cumplir con lo establecido.

“Estamos en reuniones, estuvimos con los vecinos, con los presidentes de algunas asociaciones de colonos y estamos viendo cómo se resuelve”, dijo Ricardo Veraza.

EL UNIVERSAL Querétaro informó que el representante de los vecinos del Centro Histórico, Manuel Montes Díaz, denunció el ruido de los centros nocturnos ha provocado inconformidades entre los habitantes de la zona.

Además, explicó que, hace ocho meses, 50 habitantes colocaron igual número de mantas en las cuales se lee: “Querétaro, patrimonio de la humanidad y de sus ciudadanos. Exigimos respeto, calidad de vida y solución a bares y antros del Centro Histórico y colonias aledañas. Atentamente: Asociación Vecinos Centro Histórico y Barrio La Cruz”.

“Nosotros no estamos en contra de los establecimientos comerciales como antros, bares, hoteles o restaurantes, sino que sólo pedimos que el volumen de la música se baje, la inseguridad disminuya y las calles se encuentren limpias de heces fecales, vómito y personas en estado de ebriedad, para garantizar una vida digna”, dijo Manuel Montes.

Otra de las situaciones que evitan que haya un control del ruido de bares en la ciudad es que las autoridades municipales no cuentan con la tecnología para medir los decibeles, lo que podría llevar a algunos establecimientos caer en multas.

“Las multas a veces llegan hasta los 40 mil pesos. Hay un problema, que las autoridades no tienen peritos especializados, no tienen el medidor de decibeles y a nosotros no sale muy caro comprar o contratar el equipo especial para el control”, dijo el presidente de la Asociación de Empresarios Turísticos, Ricardo Veraza.

La Norma Oficial Mexicana respecto al Ruido Ambiente, indica que de 6:00 a 22:00 horas el límite de decibeles es de 68; y el resto del tiempo debe ser de 22:00 a 6:00 horas el límite es de 65, lo que se considera en el código municipal de Querétaro en su artículo 228.

En el caso de la asociación de antros, bares y discotecas cuenta con 50% de los antros establecidos en el Centro.

Económicamente siguen siendo redituables, sin embargo, reconocen que debe haber intervención de autoridades para controlar la venta ilegal de alcohol, un asunto que está “fuera de las manos”.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Antros, Bares y Discotecas, Rogelio Garfias Torres, manifestó que la falta de respeto a los reglamentos municipales, la ausencia de mano firme en los operativos y la concesión de permisos en “masa” ha llevado a que los vecinos del Centro Histórico a quejarse por el ruido.

Indicó que la asociación obedece a la premisa de gobierno estatal y municipal “no más licencias de funcionamiento en el primer cuadro de la ciudad”.

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