A consecuencia de deslaves y caídas de árboles por la temporada de lluvias, el Ejército Mexicano ha tenido que aplicar el Plan DN-III-E en los municipios de San Juan del Río y El Marqués en dos ocasiones, informó el comandante de la 17 Zona Militar, César Gómez López.

“Llevamos en este mes de junio dos eventos: uno en San Juan del Río y otro en El Marqués con motivo de las inundaciones o desbordamiento de canales; nada grave que lamentar, pero sí donde se requiere el apoyo de maquinaria o realizar algunos otros trabajos y nuestras tropas participan en una cosa básica como es la seguridad”, explicó.

Dicho plan es una estrategia que han realizado las fuerzas armadas desde 1966 para auxiliar a la población ante cualquier contingencia derivada de fenómenos naturales o que son consecuencia de alguna actividad realizada por el hombre, como fenómenos geológicos, fenómenos hidrometeorológicos y fenómenos químico-tecnológicos.

“El tema que está ahorita vigente es la aplicación del Plan DN-III-E ante fenómenos naturales y antropogénicos, eventos que ponen en peligro la vida e integridad física de las personas”, mencionó.

En entrevista con los medios, Gómez López dijo que el auxilio que han brindado a la ciudadanía ha sido más por una cuestión de seguridad. Por ejemplo, en El Marqués atendieron el deslave que se dio la semana pasada en un tramo de la carretera 200, la cual obstaculizó la circulación por varias horas.

“Como ustedes saben en la carretera 200 hubo un deslave, tuvimos la oportunidad de estar ahí y mientras las autoridades hacían su trabajo de despejar la carretera, nosotros estuvimos apoyando en la seguridad de la mano con la policía del municipio”, destacó.

En el caso de San Juan del Río, explicó que el apoyo que brindó el Ejército Mexicano también fue por algunos deslaves y, en algunos casos, por la caída de árboles, que si bien no fueron graves o de consideración si requirieron de equipo y trabajo coordinado.

Continúan con el canje de armas

También dijo que como parte del programa de canje de armas, el Ejército recogió cuatro granadas en el municipio de Querétaro, mismas que ya fueron destruidas.

Recordó que en estas actividades su trabajo es tomar nota de lo que la ciudadanía entrega y luego destruir el material, para que de esa manera se evite cualquier accidente que ponga en riesgo la integridad de las familias queretanas.

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