Comerciantes en la ciudad erigieron un altar a la Virgen de Guadalupe después de encontrar la imagen de la Morenita del Tepeyac plasmada en un comal en el que preparaban tortillas, aun no se explican cómo pudo presentarse pero lo atribuyen a cuestiones milagrosas.

Esta aparición ya tiene al menos cinco años, pero a pesar del paso del tiempo la imagen no desaparece, al principio no creían por lo que intentaron lavar el comal para ver si se borraba, después de varios intentos confirmaron que no era una broma por lo que se dieron cuenta que esta imagen era real.

Los vendedores de carnitas en ese momento retiraron ese comal del trabajo diario y le colocaron un pequeño altar en el que lo acompañaron con otras imágenes de la guadalupana, aseguran que esto los ha ayudado a mantener la fe y tener una devoción firme además de enseñarles a los pequeños que hay un ser superior.

“A mí me pareció muy raro el que la virgen se presentara en un comal, pero pues no tengo por qué no creer, se aprecia bien clarita y pues lo único que le falta es verle los ojos, pero el manto y lo demás se puede ver, mis hermanos son los que lavaron el comal cuando vieron que apareció la virgen diciendo que no era cierto lo que les habían dicho”, Guadalupe Urbina, propietaria del local.

Al interior del local de venta de carnitas, localizado en Paseo Constituyentes casi al cruce con Prolongación Zaragoza, se instaló el altar donde diariamente los comerciantes le colocan veladoras y las personas que llegan a comer en este lugar admiran de este comal que se encuentra colocado en una pared.

De acuerdo con el vocero de la Diócesis de Querétaro, Saúl Ragoitia, la virgen se aparece por tres motivos: primero porque Dios sigue hablando a los hombres, y María es la criatura más apta para transmitir sus mensajes. “Por ejemplo, en la aparición de Guadalupe la Virgen no pidió ni advirtió nada, sólo quiso expresarnos el amor maternal de Dios”.

Segundo, para llamarnos a la conversión. Dios interviene de muchos modos en la historia y uno de ellos es a través de la Virgen. Por ejemplo, el siglo XX ha sido el más sanguinario de la historia y fue también el que más apariciones cuenta, muchas de ellas llamando a la oración y al arrepentimiento. La aparición manifiesta la preocupación de Dios por el destino de la humanidad.

Por último, porque la apariciones de María nos ayudan a fortalecer y confirmar nuestra fe tan sedienta de signos sensibles, explicó el presbítero que estas apariciones continuaran presentándose cuando los fieles más necesitan reforzar su fe.

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