La asociación civil Ecologistas de Querétaro solicitó a las autoridades y sociedad en general que se cuiden las áreas verdes como el Tángano, en la que se había comenzado a realizar construcciones por parte de la empresa Flecha Amarilla, luego de que un tribunal le otorgara el cambio de uso de suelo a favor de la empresa, sin embargo, actualmente las construcciones fueron detenidas gracias a la intervención del municipio capitalino y la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedesu).

A decir de la ambientalista Diana Laura Juárez Zamora, a pesar de que la zona el Tangano es una de las principales reservas ecológicas, ya se han realizado varias construcciones como el Centro de Convenciones, un hotel y un fraccionamiento, los cuales se han desincorporado de la zona de reserva, por lo que se ha pedido al gobierno municipal que se detenga la urbanización, ya que si las construcciones continúan se podría terminar con dicha área.

La integrante de dicha asociación civil comentó que actualmente son varios particulares los que cuentan con títulos de propiedad en el Tángano, sin embargo, no se debe aprobar el cambio de uso de suelo de dicha zona, puesto que afectarían la ecología del estado. “Nuestro mayor pendiente es si el ayuntamiento o el gobierno del estado no rescatan ese predio, y queremos que se deje para la conservación”, señaló Diana Laura.

El Tángano es un espacio natural que parcialmente abarca los municipios de Querétaro, El Marqués y Huimilpan, con una superficie de 855.3 hectáreas; posee flora y fauna nativas, especies endémicas y, por su localización geográfica, cumple con funciones denominadas: “servicios ambientales”, los cuales incluyen la recarga de mantos acuíferos, conservación de suelos, captura de CO2 y la producción de oxígeno, resultado de la producción fotosintética de la masa forestal clasificada como matorral–chaparral.

Beneficio ecológico

En lo que concierne al valor que tiene el Tángano para el estado, en materia de ecología, la señora Diana Laura Juárez explicó que es una de las zonas “de amortiguamiento”, con lo que se puede detener un poco el efecto contrario que tiene el cambio climático, y la contaminación.

“Este espacio Se debe conservar para una sustentabilidad de la ciudad, no podemos llenar de cemento todas las áreas libres que se vayan encontrando”, explicó.

En lo que respecta a la zona e Peña Colorada, Diana Laura señaló que en estos 10 años pudieron donde se buscó dicho decreto a favor de ésta zona, se hallaron con muchas trabas, ya que existían demasiados particulares que tenían interés de realizar construcciones en ese sitio.

Por esto mismo, actualmente se encuentran recolectando firmas para cumplir con la consulta popular que se pide para hacer valido el decreto en favor de Peña Colorada.

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