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De acuerdo con el alcalde de Corregidora, Antonio Zapata Guerrero, en el municipio no existe el problema de niños de la calle, ya que los menores que se tienen identificados, generalmente acompañan a sus padres a la venta de periódicos y de dulces en los cruceros, sobre todo los fines de semana.
Aseguró que en la demarcación se han detectado únicamente a seis o siete niños en estas condiciones, aunque su situación no es de vulnerabilidad. “No son niños abandonados, tienen familia y en muchos de los casos acompañan a sus padres al negocio, a la venta, ya sea de periódicos o de dulces, y es el menor de los casos, y son niños que se tienen muy identificados, pero finalmente no son niños solos”.
Destacó que aunque sus padres se encuentran en situación de calle, no requieren un albergue ya que son menores que tienen familiares que ven por su situación, les proveen alimentos y no se encuentran tampoco en una situación de desnutrición.
“Algunos son del municipio de Querétaro, sobre todo los que vienen a vender periódico, sin embargo, no tenemos prácticamente niños de comunidades indígenas en el municipio, y no estamos hablando más de seis a siete niños que, en los fines de semana, aparecen sobretodo acompañando a sus padres”.
El edil informó que cuando se presenta esta situación, los inspectores del municipio les piden a los niños que se retiren, sobre todo porque no se quiere que dejen de asistir a la escuela, o bien que vayan a ser sujetos de algún accidente por estarse atravesando entre los automóviles. Según datos del DIF estatal, al mes de febrero y gracias al programa de atención a menores, se dio atención a 287 niños de padres que trabajan en la informalidad con el objetivo de evitar que los pongan a trabajar en la capital. La ayuda la otorgó por medio de sus cuatro Centros de Día donde ofrece servicios de salud, educación, formación y alimentación.
