Con las tribunas del estadio Corregidora de blanco y aficionados queretanos coreando “olés”, Gallos Blancos derrotó 3-0 a Pumas y llegó a 27 unidades, la máxima cantidad de puntos conseguidos en su historia.

Apenas transcurrían cinco minutos en el reloj y Juan Iturbe generó peligro en la zona de Gallos, pero gracias al guardameta Gil Alcalá, los plumíferos se salvaron de que los felinos universitarios abriesen el marcador.

Ríspidos los primeros minutos, el árbitro recurrió al VAR e indicó la pena máxima a favor del Querétaro. Por lo que al 25’, Jordan Sierra abrió el marcador desde los 11 pasos.

Tan sólo tres minutos después, la pantera negra se llevó a tres defensas por el centro de la cancha y de pierna cruzada remató a puerta, con lo que puso el 2-0 en el marcador.

Iturbe iba de frente al área, el jugador quiso aprovechar la salida de Gil Alcalá, quien dejó desprotegida la portería, pero el balón se fue por un costado del arco.

De nueva cuenta, Pumas intentó llegar a la red de Gallos, y en la raya, Marcel Ruíz alcanzó a desviar el esférico con un glúteo.

Ya por el final de la primera parte, el partido fue de ir y venir. Akeloba fue a buscar el tercer tanto, el jugador marfileño remató con un tiro potente al área, pero Saldívar alcanzó a tapar el balón y evitó que los emplumados aumentaran la ventaja.

Los dirigidos por Víctor Manuel Vucetich se fueron al descanso con la ventaja y con un ambiente tranquilo en la tribuna. Además, al menos en los primeros 45 minutos, la afición respetó y no hizo el famoso grito al despeje de los porteros.

En la segunda mitad llegaron pésimas noticias para el conjunto queretano, pues Akeloba tuvo que salir de cambio a los 65 minutos, el jugador se atoró en el césped y sufrió una lesión que no le permitió regresar a la cancha, en su lugar entró Fabián Castillo.

El segundo cambio que hizo el estratega de los plumíferos fue a los 74 minutos, Jeison Lucumí abandonó el terreno de juego e ingresó Paolo Yrizar. El último movimiento fue a los 81 minutos, Ayron del Valle y su lugar fue tomado por Enrique Triverio.

Gallos Blancos no generó peligro en la segunda mitad, pero a los 82 minutos de juego apareció Triverio para sellar el tercer gol del partido, aunque al parecer hubo una mano dentro del área por parte del argentino, el silbante no revisó la jugada. Los plumíferos salieron victoriosos del encuentro.

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