Gallos Blancos a la final. Nada más importó, ni el torrencial aguacero, ni el frío, todo era poco por ver al Querétaro avanzar a la final de la máxima categoría por primera vez en su historia. La escuadra queretana, de la mano de Víctor Manuel Vucetich, buscará hacer historia, cuando enfrente a Santos por la supremacía del futbol mexicano.

Cuando el silbatazo final sonó, la banca queretana salió a festejar, hubo abrazos, felicitaciones y un estadio que se entregó totalmente a su equipo, a sus jugadores que salieron desde el primer minuto a buscar ese pase a la final y que los hace soñar... y a toda una ciudad.

Con goles de Ángel Sepúlveda (12’) y de Jonathan Bornstein (49’) Querétaro venció 2-0 (global 2-2) a Pachuca, para avanzar a la final del Clausura 2015 por su mejor ubicación en la tabla, cuando muy pocos se imaginaban que este equipo llegaría a estas instancias.

El estadio La Corregidora cantaba como un solo hombre, con cánticos de alegría, de pasión desbordada por ver a su equipo, ese que los tenía acostumbrados a sufrir, a las penurias, a las derrotas, disputar una final y hacerlos soñar, ilusionarlos con el campeonato, con alzar una copa.

Antes del partido, un pertinaz lluvia cayó sobre el sur de la capital queretana, lo que no impidió que los aficionados, a la salida de los equipos, realizaron un mosaico con bufandas que la directiva colocó en los lugares, mientras los cánticos de la Resistencia Albiazul —a los que se unió todo el estadio— llenaron el ambiente húmedo y frío de La Corregidora.

Desde el arranque de las acciones, Gallos se fue al frente buscando el gol que les abriera la puerta para colarse a la final. El primer aviso serio llegó a través de Ángel Sepúlveda, quien estrelló un poderoso disparo en el travesaño del marco defendido por el ‘Conejo’ Pérez, quien sólo siguió con la mirada el recorrido del balón.

El esfuerzo tuvo pronta recompensa al minuto 12, cuando en una jugada individual, Sepúlveda se fue quitando defensores hidalguenses para colarse hasta el centro del área de los Tuzos para disparar a placer y vencer al ‘Conejo’, y así darle vida a los pupilos de Víctor Manuel Vucetich, y de paso calentar el ambiente en La Corregidora que no dejaba de apoyar a su equipo.

Luego del gol, Pachuca intentó reaccionar y se fue al frente, buscando preocupar a cuadro local.

Diego Alonso se vio obligado a hacer un cambio prematuro en su alineación, sacando por lesión a Germán Cano, mandando en su lugar a Ariel Nahuelpan, al minuto 23.

Querétaro estuvo cerca del segundo gol cuando William da Silva centró y el balón se paseó peligrosamente por toda el área visitante. Luego vinieron sendos disparos de Emanuel Villa y George Corral, justo antes de que un fuerte aguacero cayera sobre el estadio.

Los emplumados buscaban afanosamente el gol que le diera el pase a la final para enfrentar a Santos Laguna, con disparos de Corral, Jimmy Gómez, Villa, Osuna, aprovechando las condiciones del terreno y del balón, buscando el error defensivo, una distracción que diera esa ansiada anotación.

El primer tiempo terminó con aplausos para los locales, al grito de “si se puede, si se puede”, para animar a unos Gallos que aún necesitaban ese gol que los pusiera en la final del futbol mexicano por primera vez en su historia.

Para la parte complementaria, Gallos salió volcado al frente y al minuto 49 Jonathan Bornstein, a pase de ‘Danilinho’ marcó el segundo gol, que hizo que todo el estadio se emicionara y sintiera ya la final en La Corregidora.

Pachuca, al verse igualado en el marcador global se fue al frente, y poco a poco fue tomando la iniciativa del partido, un arma de doble filo, pues en cualquier momento podría venir la descolgada queretana.

Nahuelpán se llevó tarjeta amarilla por querer engañar al árbitro al fingir una falta en el área chica queretana, luego de que había entrado con peligrosidad a los territorios de Volpi.

Y de nuevo la lluvia se hizo presente en La Corregidora, momento en el que entró Marco Jiménez y salió William da Silva, en medio de una fuerte ovación que el público, estoico, aguataba el torrencial aguacero.

Vucetich tuvo que hacer un cambio obligado por una aparente lesión de Jimmy Gómez, dándole juego a Antonio Naelson ‘Sinha’.

Hacia el final del partido, Vucetich mandó al terreno de juego a Víctor Milke, sacando a ‘Tito’ Villa, quien en medio de una ovación dejó el terreno.

Gallos Blancos está en la final del futbol mexicano por primera vez en su historia y esta semana nada más importará en Querétaro. Nada más.

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