Más Información
Enamorada de las tradiciones de El Pueblito y la belleza de la vestimenta que con orgullo portan quienes le danzan a la Virgen, Linda Sánchez comenzó a pintar los colores de las fiestas del municipio de Corregidora, y con la serie Mujeres Sagradas, que se inaugura el próximo 1 de marzo en el Museo Regional de Querétaro, rinde homenaje a las mujeres que mantienen vivas las tradiciones.
La exposición incluye 11 piezas de la corporación de las Inditas de El Pueblito, tres obras de las Pastoras —de la cultura otomí-mazahua del Estado de México—, y tres creaciones más de la indumentaria purépecha.
“Yo vivo muy cerquita la tradición de las Inditas, porque yo soy de Corregidora, entonces siempre estoy detrás de ellas, y hay inditas que llevan a sus hijitos de días o a sus nietos muy pequeños, ya con su indumentaria tradicional, es una cosa bellísima, también hay abuelitas ya de la tercera edad que hasta en silla de ruedas van y así están danzando, es una fe enorme, por eso yo digo que son mujeres sagradas”, platica la pintora Linda a EL UNIVERSAL Querétaro.
En la muestra destacan piezas en grisalla con exaltaciones en color, para destacar el punto de cruz y otros elementos de la vestimenta. Desde niña, Linda comenzó a observar las fiestas de El Pueblito, admirando el color y belleza de indumentaria, bordada con punto de cruz, y aunque también sabe de bordar, ella utiliza pincel y óleo para crear esos bordados.
“Me enorgullece pintarlas, y aunque yo nunca he participado en las danzas, desde niña aprendí el punto de cruz y me gusta sentir lo que sienten cuando hacen sus bordados, yo respeto mucho su trabajo, es admirable, y en lugar de utilizar hilo y aguja para bordar como ellas, uso pincel y óleo para crear esos vestidos tan bellos que portan”, agrega.
Mujeres Sagradas tiene el objetivo de compartir con los espectadores la belleza de las tradiciones mexicanas.
“Lo que quiero es transmitirle al público ese sentimiento, esa pasión que yo tengo con la cultura mexicana y que les dé un poquito de esperanza en estos tiempos tan complicados, en todos los aspectos; quiero que volteen a ver una de mis pinturas y digan: Qué bonito es México. Y que eso lo puedan transmitir a otras personas”, detalla.
Linda Sánchez estudió diseño gráfico, su obra artística comenzó con el abstracto y paisajes, después llegó al hiperrealismo y empezó pintando las famosas muñequitas de trapo, típicas de la cultura otomí.
“Y me enamoré de nuestra cultura, nuestra raíz otomí, así comencé a adentrarme en la pintura y ya tengo ocho años pintando profesionalmente y todo comenzó porque yo quería pintar algo que verdad deje un legado y que exalte mis tradiciones”.
Mujeres Sagradas se inaugura este jueves, a las 19:00 horas, en el Museo Regional de Querétaro, en donde estará en exhibición hasta el 8 de abril.
Conectada con las raíces
Linda Sánchez nació en Querétaro, pero desde niña vive en el municipio de Corregidora.
Estudió diseño gráfico y a la par de su carrera comenzó a pintar.
Sus primeras obras fueron de abstracto, bodegones y paisaje.
Comenzó con el hiperrealismo retratando muñecas otomíes.
Tiene ocho años dedicada profesionalmente a la pintura.
Desde pequeña comenzó a sentir admiración por la belleza de la indumentaria usada en las fiestas de El Pueblito.
La artista aseguró que se enamoró de la raíz otomí.
