Como cada semana, sigo recibiendo tus dudas e inquietudes para apoyarte como psicoterapeuta y sexóloga.

Pregunta: Hola, buenas noches Rocío. Me llamo Harry y leo su columna en EL UNIVERSAL Querétaro todos los viernes. Tengo un problema sexual y creo que necesito ayuda, ojalá me pueda orientar. Le platico.

Tengo 23 años y últimamente me ha faltado el apetito para sostener relaciones con mi novia, a veces estamos juntos y nos estimulamos, pero no logro tener una erección, y cuando podemos llevar a cabo nuestro primer acto sexual, ya no hay forma de tener un segundo, pues no hay deseo, ni mucho menos erección. Eso me molesta mucho y a ella también. No sé qué hacer, me siento muy angustiado. De antemano, gracias.

Respuesta: Hola Harry, gracias por tu confianza. Me parece que tu problema se está haciendo un círculo vicioso, “no tengo erección y me enojo, me enojo y no tengo erección”.

De entrada, hay que tomar este problema en serio y ver todas las posibilidades que podría estar ocasionando esta situación.

Hay que descartar si tu problema es de índole médico. Parece que estamos hablando de un cuadro de disfunción eréctil, y aunque no lo creas es un tema muy recurrente en los hombres. Las causas pueden ser muchas y muy variadas, te platico las principales:

—Antecedentes de traumatismo pélvico o perineal.

—Problemas endocrinos, causas hormonales.

—Tomar mucho alcohol antes de las relaciones sexuales.

—Problemas cardiovasculares.

—Fumar tabaco.

—Estrés y ansiedad.

En los casos anteriores tendrás que ir con el médico especialista para tratamiento. Sin embargo, hay muchas otras situaciones que pueden generar ansiedad en los chicos como tú.

Te doy los siguientes tips, pero si ves que no mejoras, te aconsejo que vayas con un psicoterapeuta o un sexólogo.

1.— Expectativas en el tamaño del pene. Hemos sido víctimas de mitos referentes a que el tamaño suple la habilidad sexual, lo cual es completamente falso, muchas mujeres se quejan más de que sus parejas no las acarician que por el tamaño del pene.

2.— Concentrarse en los orgasmos. Es muy común que los hombres piensen que ellos son los responsables de los orgasmos de su pareja, entonces quieren tener súper erecciones para que ellas lleguen al clímax. Esto aparte de crear estrés y ansiedad, deja muy devaluado al acto sexual.

Recuerda Harry que el sexo también es un acto amoroso, es una expresión de afecto. Obviamente necesitas pensar en la técnica, pero no exclusivamente, porque entonces lo que sucede es que comienzas a pensar: “¿volveré a fallar?”, “¿podré aguantar el orgasmo el suficiente tiempo para que mi pareja llegue al clímax?”, “¿llegaremos ambos al orgasmo?”

Cuando se tiene que luchar con esos pensamientos, el sexo se vuelve una pesadilla y se traduce en ansiedad, que es el peor enemigo del placer.

Relájense, disfruten de las sensaciones, ya que lo importante no es el orgasmo, ni el tamaño del pene, sino la intimidad y la conexión con la persona que amas.

Más que una instrucción, los principales ingredientes para un buen acto amoroso son: paciencia, comprensión y afecto. Sin estos como base, corremos el riesgo de perdernos ese encuentro hermoso, natural y placentero.

Intza69@yahoo.com