adri.silvestrel@gmail.com

Oficialmente, el equinoccio de primavera de este año será el 20 de marzo. No obstante, los cambios ya comenzaron: los colores son más brillantes, se asoman las primeras flores y hacen acto de presencia las deliciosas frutas como mango, mamey, fresa, cereza y melón, entre otras. Además, hace mucho calor. Este último es el pretexto no sólo para beber más agua, sino también para tomar un rico helado.

En la actualidad, hay propuestas innovadoras, una de ellas es la de Romy y Federico Gutman quienes elaboran este antojo fuera de lo común. “Tenemos más de 70 sabores, algunos cambian dependiendo de la temporada porque utilizamos frutas frescas para elaborarlos. Por ejemplo, tenemos el Mirey, que es mamey con cognac, el Pin Pony, de fresa, pimienta rosa, licor de moras y vodka, y el Tamachin, de tamarindo con mezcal”, explica Gutman.

“El Mariachi en bikini lleva guanábana, coco y mezcal; el Ride Melon es de melón, midori y mezcal; y acaba de entrar la granada, así que hicimos uno llamado chupacabras que es de esta fruta con jamaica y aguardiente de caña. También, está el de mango con midori, cardamomo, arándano y vodka”, agrega el dueño de Helado Oscuro.

Los sabores clásicos que se pueden encontrar durante todo el año son “el Dark Vader que es de chocolate, licor de cacao y vodka, Alice in Woderbra de vainilla, chocolate, avellana y whisky y Galaxia ficticia de oreo, kahlúa y Baileys. Uno de los más vendidos es el Hombre lobo, que lleva café express y Jack Daniels. Hay ediciones especiales y sabores sin alcohol, como resa, queso con arándano, vainilla y nutela con chocolate, pero nuestra especialidad son los sabores con alcohol”, puntualiza Gabriel Carmona, socio de la sucursal ubicada en Liverpool.

Su idea es fomentar la cultura de disfrutar este postre en cualquier época del año, asegura que aunque el paladar de los mexicanos se está abriendo a nuevas posibilidades, aún falta mucho por hacer. “Así que la idea es sorprender a los clientes y darles excusas para seguir regresando”, añade el creativo Federico.

Todo se puede

Uno de los países donde se toma helado a pesar del clima es en Inglaterra. Y para sorprender, precisamente en la ciudad de Bristol, Charlie Harry Francis decidió comprar una proteína fluorescente a un científico chino y aplicarla en un helado para que brillara desde la primera probada. Su negocio se llama Lick me I'm delicious (Lámeme soy delicioso).

El ingrediente mágico es conocido como Green Fluorescent Protein (GFP), el cual debe su fosforescencia a una proteína obtenida de las medusas. Ésta se utilizaba en proyectos de investigación relacionados con el estudio del cerebro o el cáncer, pero Charlie vio la oportunidad de aplicarla en el ámbito de la alimentación. No obstante, el carácter extraordinario del producto le permite que el precio sea de 140 libras, es decir, alrededor de 3,220 pesos.

Ahora el inglés trabaja en helados con quinina, elemento que en los gin tonics provocan el color azul que reacciona ante la luz ultravioleta de los antros; y también en su blog afirma que tratará de crear un helado invisible, por eso recurrirá a científicos expertos.

A la mexicana

Por otra parte, a la manera típica de los mexicanos y siempre con sorpresas para el paladar se llevará a cabo la tradicional Feria de la Nieve en la ciudad de México, que este año celebrará 130 ediciones. Como en cada ocasión participarán alrededor de 120 productores con más de 70 sabores de nieve. La cita es en la plaza Quirino Mendoza, ubicada en Santiago Tulyehualco, Xochimilco; del 28 de marzo al 6 de abril.

En México la tradición de tomar nieve comenzó antes de la llegada de los españoles, los indígenas traían hielo desde las faldas del volcán Popocatépetl. Se transportaban en canoas a través de los lagos de Chalco y Amecameca; ya en Tulyehualco, metían el hielo en las zanjas y lo envolvían en zacate o rastrojo para conservarlo.

La nieve, lo que hoy sería un raspado, era endulzada con miel de abeja o de avispa y aguamiel para ofrecerla a Moctezuma; sólo las clases altas podían probarla. En 1592, Fray Martín de Valencia alentó a los indígenas, entre otras cosas, a agregar fruta al hielo; después, con el ingenio de los pobladores se creó su amplia variedad de sabores. También decidió que la Feria comenzara antes del Domingo de Ramos y terminara el Domingo de Resurrección; hasta la fecha se sigue haciendo de esa forma, por eso la fecha cambia cada año.

“Los sabores se dividen en frutales, cereales, medicinales, amorosas, exóticas, marinas, enchiladas, envinadas y de leche. También están las nieves calientes, que son a base de licor. La imaginación de los neveros no tiene límites y en conjunto hemos hecho sabores como beso de vampiro, que es queso con fresa de agua, o nieve de pastel de queso con zarzamora. Todo se puede hacer nieve, sólo hay que probar y hacer experimentos, hasta que queda el sabor que queremos”, explica María de la Luz Mora Jiménez, heredera de la tradición de hacer nieve.

Tradicional feria es la ocasión ideal para degustar una refrescante nieve y resguardarse de las altas temperaturas. También tienen lugar otros eventos como bailes folklóricos, actuaciones artísticas y musicales.

Durante estas fechas Santiago Tulyehualco es la capital mundial del color y el sabor.

De esta menera, en Tulyehualco se elaboran miles de litros de nieve, desde las más tradicionales como el limón, piña, queso, vainilla, chocolate y fresa hasta las más exóticas creaciones de Tequila, víbora de cascabel, nopal, chicharrón, camarón, hierbabuena y mole.

Nutritivos

Los especialistas en nutrición coinciden en que cualquier alimento en exceso es dañino, por eso si se consumen de forma moderada y en la proporción adecuada, las nieves y los helados pueden ser nutritivos. Y es que las nieves sólo utilizan frutas naturales, en algunos casos leche, azúcar y agua; los helados además de dichos ingredientes, tienen grasas vegetales generalmente.

De hecho, ambos se consideran fuente importante de diferentes vitaminas, energía calórica, proteínas de alto valor biológico y minerales (calcio, magnesio, sodio, potasio, etc). Su valor calórico depende de sus componentes, pero generalmente es bajo.

Por lo tanto, en esta época de calor no hay pretexto para no disfrutar de una nieve o un helado, pues hay una gran variedad de sabores, desde los clásicos, hasta los exóticos.

Entonces ya lo sabes, puedes acudir a locales cercanos, a la Feria de la Nieve o hasta el extranjero , la idea es refrescarse de una manera deliciosa en Primavera. Lo importante es refrescar el paladar con una creación que por años ha estado presente en el gusto de la humanidad

Google News

TEMAS RELACIONADOS