Brutalidad de feminicidas de Ecatepec puede invisibilizar casos menos violentos, dice activista.

El caso de la pareja feminicida de Ecatepec, Estado de México, sospechosa de haber asesinado al menos 20 mujeres, es tan excesivo en sus detalles que puede afectar a otros futuros casos de feminicidio que las procuradurías o fiscalías de justicia invisibilicen otros feminicidios porque no tienen el mismo grado de brutalidad, consideró la activista Maricruz Ocampo Guerrero.

La también promotora de la activación de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres señaló que, por ejemplo, en Querétaro “tenemos una renuencia total por parte de las autoridades de investigar el feminicidio, y este caso que es realmente excesivo, que está fuera de la norma, que está más allá de lo que estadísticamente podemos o hemos considerado, que se utilice como el ejemplo y que las investigaciones se realicen de la manera correcta”.

Otro tema que preocupa a las organizaciones civiles, indicó, es que las autoridades no investiguen las desapariciones de otras mujeres y que se le quiera culpar a la pareja detenida de esos feminicidios, cuando quizá no fueron víctimas de estos sujetos.

Recalcó que este caso es totalmente extremo, pues cumple con casi todas las causales de feminicidio, y eso pudiera ser contraproducente para la causa que los grupos feministas persiguen, en el sentido de visibilizar la violencia.

Otra de las preocupaciones de este caso es que surjan los imitadores y que a esta pareja le adjudiquen todos los casos de feminicidios en ese municipio.

“Las fiscalías, a veces, están tan rebasadas por su gastos, porque no tienen presupuesto, porque su personal no está capacitado, porque no acaban de entender el nuevo sistema penal, que de ahí se agarren para no investigar”, explicó.

Agregó que una preocupación más es que se piense que sólo personas con desórdenes mentales son capaces de cometer feminicidios, cuando en realidad, para que alguien se convierta en feminicida basta que no valore a las mujeres y sólo las vea como un objeto.

“No necesariamente eres una persona con un problema mental, eres consecuencia de tu cultura y de tu sociedad, pero no quiere decir que tengas una discapacidad intelectual o una discapacidad que tenga que ver con tus facultades”.

Añadió que hay personas que actúan con la mayor naturalidad y que en sus casas ejercen violencia, porque es lo que aprendieron.

Precisó que, contrario a lo que se pudiera pensar, el feminicidio y asesinos como los de Ecatepec no son fruto de la descomposición social del siglo XXI, pues consideró que a lo largo de la historia se han presentado feminicidas en serie.

Recordó que en el caso de los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez, Chihuahua, también se sospechó de asesinos seriales.

“No es que esto sea algo nuevo, esto ha existido a lo largo de la historia. Lo grave será que las autoridades lo usen de pretexto para no investigar, cuando las autoridades tienen la responsabilidad de investigar todos los casos y no usar como emblema del feminicidio, y de los feminicidas a una persona que obviamente necesita intervención siquiátrica”, puntualizó.

cetn

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