El nuevo ómbudsman de Querétaro me parece que debe de ser una gente que no tenga cola que le pisen, para empezar. Segunda, de amplia trayectoria en el tema, y experiencia en el tema, y tercero, que sea completamente independiente, que no tenga vínculos, obviamente hacia ningún poder o partido, o fracción.
Me parece que de las gentes que se han planteado habrá elementos para valorar, que pudiesen tener esa posibilidad, pero sobre todo, que tengan la convicción de servir a la gente y de ser transparente y honesto en ese tema, para entender la problemática que va a haber en la Defensoría, que desgraciadamente se causa con la votación y con las circunstancias en las que se da este cambio.
Entiendo que hay muchos que se han registrado, y ya sabemos cuántos se han registrado. Alguien de la sociedad civil sería el perfil ideal hoy para todo, tanto para estos cargos, como para cualquier otro cargo. Ya los cargos de elección popular están regidos, obviamente, por la ciudadanía.
Hay (hubo) varios que vinieron e hicieron acciones políticas. Decían que no los habían dejado entrar. Aquí está abierto para todos y que se registraran y a partir del jueves (ayer) saber cuántos se registraron.
Yo creo que no había justificantes para no ratificar a Miguel Nava como ómbudsman. Con los elementos de prueba que tuvimos, comenté claramente, me parecía que no había, no encontraba un elemento que me permitiera decir que el trabajo de la Fiscalía de los Derechos Humanos de Querétaro fuera malo, que al final de cuentas es lo que estamos avalando, si una institución funciona o no funciona.
El reto del próximo o próxima titular de la Defensoría será seguir con la línea que traía la dependencia. Es decir, sin intentar, sin, obviamente, sucumbirse, sin temblar, señalar claramente los casos en los que se estén violentando los derechos humanos.
Hay mucha gente que dice que hay muchos más casos. Bueno, pues tendrá que retomarlos y exigir la comparecencia de las autoridades, como para mí, insisto, el anterior ómbudsman lo realizó en su gestión.
Cuando estás en un cargo obviamente, como esos, cuando tiene la facultad, como es el caso de ingresar iniciativas a la Legislatura, tienes la misma capacidad de un diputado de ingresar iniciativas de ley y hay varias que causaron resquemor, la propia Ley de Derechos Humanos, aún está pendiente, está causó que la parte que él ingresó —Miguel Nava— aún no se analiza. La parte de matrimonios igualitarios que también presentó, bueno también, tanto en la anterior Legislatura como en la actual.
Obviamente, causa resquemor para algunos el tema de señalar a gobernadores, como lo hizo con el anterior (José Calzada Rovirosa), como lo hace con el actual (Francisco Domínguez Servién) y a alcaldes y a aquellos que estemos en funciones, obviamente a algunos les incomodará, pero es parte de su labor y su trabajo.
Al final de cuentas, es defender a la ciudadanía de las malas acciones que, quizá, los que estamos en alguna autoridad o con alguna autoridad, estemos haciendo mal las cosas.
Para mi, insisto, no encontré en el dictamen que se presentó ninguna objetividad (para destituir a Miguel Nava). Se presentó un dictamen basado en acusaciones, basado en inclumplimentos a ley, hecho por cuatro diputados, la de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el del Partido Acción Nacional (PAN), y la del Verde, acusando de una serie de desfalcos, de desvío de recursos y no cumplir con la ley.
Sin embargo, no veo ninguna denuncia. Es decir, lo comenté claramente en el pleno, de que más que un dictamen de ratificación o no ratificación parecía una dictamen de destitución (que se presentó el miércoles de la semana pasada).
Por eso señalaba que sí se había cometido alguna irregularidad y esos cuatro diputados que habían mandado el dictamen sabían, pues deberían de haberlo denunciado o presentado, obviamente, su destitución, ya no debería de ser defensor de los Derechos Humanos.
El próximo defensor de los Derechos Humanos, en resumen, debe de ser una persona con calidad moral, que no tenga ningún tipo de sesgo partidista, ni cercanía con ninguna autoridad.
Además debe de darle continuidad el trabajo hecho por Miguel Nava, para seguir con una línea de denuncia ante los casos de abuso por parte de las instancias públicas y sin temor a denunciar estas irregularidades, pues se trata de un cargo donde se debe de defender a la sociedad de estos casos, aunque en muchos de los casos pueda incomodar a algunos de los actores políticos o funcionarios.
