La Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia (Prodemefa) atiende tres casos de explotación laboral de menores y un caso de explotación sexual, cuyos hechos delictivos fueron detectados en la cabecera municipal de San Juan del Río.

El titular del organismo, Arturo Campista, explicó que los responsables de la explotación cometida en contra de los menores son familiares cercanos a los pequeños, que fueron separados de éstos para recibir atención psicológica.

El caso de explotación sexual fue detectado en un domicilio de la colonia San Cayetano. Se trata de una menor de 11 años a la que la madre contactaba con clientes vía telefónica, acudían al domicilio de la mujer y en ese inmueble ofrecía a la menor para prostituirla.

La Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia inició un proceso penal en contra de la mujer que se encuentra en el Centro de Readaptación Social de San Juan del Río.

La niña afectada quedó bajo custodia de su hermano mayor, pero debe acudir por más de dos años a terapias sicológicas que ofrece el DIF municipal a través de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia.

“Era la madre la que contactaba a los clientes para prostituirla y la mujer cobraba. La señora está actualmente en el Cereso y la niña con un hermano mayor, el DIF está trabajando para volver a reintegrarla a su vida normal y con su familia, pero la pequeña va a requerir más de dos años de atención sicológica”, detalló.

Campista reconoció que en el caso de delitos sexuales en contra de menores, estos requieren de una atención constante para poder superar la afectación emocional.

La Prodemefa inició también tres procedimientos en contra de parientes de menores de edad explotados laboralmente en la cabecera municipal de San Juan del Río. Los niños provenían del Estado de México y de Michoacán y los responsables eran tíos de los afectados.

“Los tres menores fueron localizados en semáforos pidiendo dinero que le entregaban a adultos. En dos de estos casos se inició la averiguación en contra de los tíos que los obligaban a laboral, se trata de niños de 7 y 9 años y la Procuraduría General de Justicia nos apoyó en estos procedimientos”, dijo Campista.

Los menores fueron detectados en la zona centro y en la avenida Paseo Central; uno de ellos fue canalizado al albergue Sor Juana Inés de la Cruz, ubicado en Ezequiel Montes, donde recibe atención médica, alimentación y estudios durante la semana.

A través del albergue Sor Juana Inés de la Cruz es que se ha atendido a los menores en situación vulnerable afectados en San Juan del Río.

El Sistema Municipal DIF busca recursos propios y del estado para poder crear en San Juan del Río un albergue que permita atender a estos menores afectados, sin necesidad de que sean canalizados a Ezequiel Montes, explicó Campista.

En todo el estado operan 11 albergues para niños en situaciones vulnerables, a quienes se les brinda techo, alimento y clases, y el fin de semana retornan con sus familiares que mantienen sus custodias. De esta manera se trabaja en su reinserción al seno familiar atendiendo sus necesidades de alimentación y educación.

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