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La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en coordinación con la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu) reactivarán el proyecto de mejora de hornos ladrilleros para disminuir la contaminación, buscando para ello un nuevo financiamiento federal, informó el delegado de Semarnat en la entidad, Óscar Moreno Alanís.
El funcionario explicó que mediante la colaboración de la Secretaría de Desarrollo Sustentable se busca el recurso federal para dar continuidad a la tecnificación de los hornos ladrilleros y disminuir los niveles de contaminación en las comunidades de San Nicolás y Bordo Blanco, en Tequisquiapan.
“La Secretaría de Desarrollo Sustentable está trabajando en un proyecto muy importante para la comunidad de San Nicolás, donde se concentra el mayor número de hornos ladrilleros, ahí están impulsando un modelo ecológico para evitar que se expida mayor contaminación”, dijo Moreno Alanís.
Por lo pronto opera un horno ecológico como prototipo del proyecto que se pretende impulsar en dicha localidad, para luego replicar estos hornos en otras zonas de Tequisquiapan.
“Estamos tratando de obtener más recursos para poner en marcha otros hornos en San Nicolás. A la delegación de la Semarnat se le han solicitado recursos, y para ello ya analizamos la manera de gestionar dinero y dotar de más hornos a esta comunidad”.
El delegado detalló que el prototipo de horno que actualmente opera en esta comunidad de Tequisquiapan ha demostrado a los productores que se pueden reducir los niveles de contaminantes de forma significativa.
“Hay veces que los productores consideran que estos prototipos no son viables, pero estamos demostrando a la comunidad que justamente estos nuevos hornos sí son funcionales”.
En San Juan del Río fueron impulsados 19 hornos ladrilleros ecológicos como parte de un proyecto iniciado desde 2009, para disminuir las emisiones contaminantes en la zona de San Pedro Ahuacatlán y Vista, sin embargo, a la fecha estos hornos no operan correctamente, al emplear basura, llantas y poliéster como combustible.
En su momento la coordinadora de Ecología de San Juan del Río, Jessica Gómez, explicaba que la competencia por ofrecer ladrillo a precios atractivos obliga a los productores a emplear desechos, cuya adquisición es más barata que la compra de combustibles adecuados como derechos de madera.
En San Juan del Río se ha pretendido dialogar con los productores para fijar un precio generalizado de ladrillo y con ello evitar la competencia desleal entre los ladrilleros, sin embargo, la titular de Ecología advertía que para ello era necesario acordar un mismo precio con los productores de Tequisquiapan.
Moreno Alanís agregó que es importante concientizar a los productores de los daños que se generan al medio ambiente por las emisiones contaminantes de una producción común, siendo importante el uso de combustibles adecuados y de los hornos tecnificados para lograr resultados tangibles.
“Hay empresas que nos están ofreciendo productos adecuados, prácticamente son residuos de los aceites, que es con lo que se puede trabajar para reducir la contaminación”, concluyó.
