Madrid.— Zinedine Zidane afirmó ayer que, pese a tener al Real Madrid luchando por la Liga en la última jornada, al estar a trece puntos de distancia del Barcelona, y en la final de Liga de Campeones, todavía no ha ganado nada ‘para pensar’ que pueda seguir al frente del conjunto madridista.
A la vez que muestra su felicidad por cumplir el sueño de dirigir al Real Madrid, Zidane deja dudas sobre su futuro. Condiciona todo a la conquista de títulos, pese a saber que tiene la confianza de la directiva y el presidente Florentino Pérez. Previo al juego de hoy contra La Coruña, Zidane dijo “lo importante para mí es el trabajo que he hecho, pero no sólo yo, el de los jugadores ha sido bueno”.
Entre tanto, el entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, se mostró convencido de que, para ser campeón de Liga, su equipo tendrá que ganar hoy al Granada en el nuevo estadio de Los Cármenes, porque el Real Madrid no fallará en Riazor. “Esa es la sensación que tengo desde hace cuatro o cinco semanas”.
Por eso, el técnico azulgrana ha adelantado que en su banquillo nadie estará pendiente del encuentro de La Coruña. “Sólo hay una partido: el de Granada”.
Luto madridista. Los jugadores de Real Madrid utilizarán cintas negras en su último partido de la temporada en señal de luto por la muerte de varios seguidores del club en un ataque en Irak.
El Estado Islámico aceptó responsabilidad por el ataque de ayer en una cafetería en Balad, a 80 kilómetros al norte de Bagdad, en el que fallecieron 13 personas, aparentemente miembros de la barra madridista en ese país.
Real Madrid y el gobierno español dijeron que el lugar del ataque era el punto de reunión de los hinchas. “El club muestra su tristeza total y ofrece su afecto y sus condolencias a los familiares y amigos de las víctimas”, señaló el Madrid. “Los jugadores lucirán mañana [hoy] un simbólico brazalete negro en señal de luto y respeto”, añadió el comunicado. Agencias
