Todos hablan de que para ganar el partido contra Estados Unidos se debe poner garra, corazón, sangre, entrega, muchos adjetivos que se supone vienen implícitos dentro de lo que se considera pone el futbolista como algo natural.
Pero en el futbol, aunque se juega con los pies, se debe pensar con la cabeza y ahí es donde la táctica habla, ahí es donde el cerebro vale.
¿Cómo derrotar tácticamente a Estados Unidos? ¿Cómo ganarle a un equipo que parece le ha tomado la medida a la Selección Mexicana?
Un viejo maestro, Manuel Lapuente, técnico nacional en el Mundial de Francia 1998, deshoja la margarita y recomienda a Ricardo Ferretti “atacar, atacar y atacar”, sólo así caerá el muro estadunidense.
Lapuente sabe que Jürgen Klinsmann, técnico del equipo norteamericano, no se saldrá de su librito, que esperará a que México tome la iniciativa para después jugar al contragolpe.
—¿Cuál es la fórmula contra eso?
—Bueno, partamos del tema de que Estados Unidos te va a jugar a lo mismo y que no va a salirse de su esquema por ningún motivo. México entonces, tiene dos opciones: aceptar el reto o decir: ‘haré lo mismo que tú, esperar a que tengas la pelota, robártela y contragolpearte’; o también ir sobre él, jugar el mayor tiempo posible en la cancha de ellos. Sólo hay de dos sopas.
Futureando, viendo “Más allá de lo evidente” Lapuente cree que el Tri saltará a la cancha del Rose Bowl a jugar “como le gusta al ‘Tuca’, con dos extremos bien abiertos, uno de ellos mentiroso, bien pegados a la línea y dos laterales que se incorporen de manera indistinta y atacarlos por ambos lados, porque por el centro, pasar será dificilísimo”.
—¿Y cómo evitar lo de siempre?
—Haciendo todo bien programado y presupuestado. A ver... sé que ellos van a esperar a que cometa un error, así que siempre hay que terminar las jugadas, siempre. Soltar la pelota lo más rápido posible, no entretenerla en la media cancha y reitero, explotar los dos extremos.
—Eso es teniendo la pelota, ¿y cuando no se tiene?
—Mira, se puede marcar con y sin la pelota. Se puede marcar aun cuando estés al ataque, eso es estar bien posicionado en todo momento y saberse echar para atrás en los momentos pertinentes, cuando ellos estén con el balón hacer dos líneas de cuatro y que no pasen.
—¿Es mejor jugar con línea de cuatro o cinco?
—Para mí el problema pasa en cómo vamos a jugar en media cancha. Si armas un buen parado, un 4-3-3, los meterás en serios problemas, esto es con la idea de que estés en ataque lo más posible.
Pero para armar una buena estrategia, se deben de tener los elementos adecuados. Para Lapuente si alguien falta en la Selección “es el mejor delantero del momento: Omar Bravo. Para mí, Omar es quien debería estar junto al ‘Chicharito’ en el ataque, sobre todo por la izquierda, porque Omar sabe hacer eso, y esto provocaría que un medio o un lateral entre por fuera, haría eso una y otra vez, mucho centro para encontrar opciones de remate”.
