El traje tradicional de las mujeres de Corregidora se caracterizaba por sus telas floreadas y un bello bordado de punto de cruz. Las naguas y enaguas eran largas, hasta cubrir los tobillos, y siempre usaban un saco, además del rebozo, porque en tiempos antiguos era “deshonesto” que una mujer anduviera con los brazos descubiertos o la falda a la rodilla.

La maestra Aurora Zúñiga, quien resguarda una colección de los trajes tradicionales de los municipios de Querétaro, resultado de años de investigación y pasión con la cultura, cuenta que el traje tradicional de Corregidora hoy está en completo desuso. Su interés al promover su investigación y colección, es acercar a las nuevas generaciones a las raíces de su cultura e historia.

“Lo que quiero es que las nuevas generaciones conozcan parte de lo que fue su cultura, ahora con tantos medios tecnológicos, a la juventud no le interesa conocer sus raíces y yo pienso que lo importante es conocer de dónde venimos, porque así sabremos a dónde vamos”, dice a EL UNIVERSAL Querétaro.

Trabajando con la Corporación de la Primera Danza de El Pueblito se hizo amiga de varias mujeres de Corregidora que le hablaron de la vestimenta que portaban sus madres y abuelas. También logró ver algunas fotografías, pero fue la historia oral, el cuento de quienes lo vivieron, lo que le permitió a la maestra Aurora mandar a confeccionar unas réplicas de los trajes originales de este municipio.

En su colección tiene dos trajes de mujer, que se diferencian por las telas, pero en ambos resaltan sus bordados, adornos florales y otros motivos de la naturaleza.

“Usaban dos o tres telas especiales, para la enagua y el saco usaban una tela floreadita, siempre tenían flores en el adorno de los trajes y el bordado de punto de cruz. Encima de la blusa, también bordada, llevaban el saco con manga larga o tres cuartos, y su rebozo”.

El tiempo, el cambio social y también los gustos, llevaron a dejar de lado el traje tradicional y ahora está en desuso por completo.

“Las personas que me platicaron de estos trajes ya no están, ya murieron, hay algunas personas de las mayores que aún lo usan, pero ya no para el diario, lo han adaptado a la Danza de las ‘Inditas’, pero no es el mismo, así como se visten se supone que andan en fondo, porque lo bordado tiene que llevar la enagua y tiene que llevar el saco, antiguamente era muy deshonesto que tú anduvieras sin saco, sin rebozo o con la enagua a la rodilla, tenía que ser todo bien tapadito”.

Las telas se adquirían en los obrajes que había en los barrios de Querétaro, pero también utilizaban telas de otos sitios.

“En estas cuestiones de llevar y traer los arrieros tenían que colaborar con la gente, ellos traían de otros estados o ciudades muchas cosas, llegaron a introducir cosas de Hidalgo o Michoacán (...), que la gente iba adoptando para su vestimenta”.

Los trajes de los hombres eran los primeros en mutar, porque eran ellos quienes salían y aprendían costumbres de otros pueblos.

“La mayoría de los municipios ha perdido todos sus trajes tradicionales, los únicos que los conservan, aunque con muchas innovaciones son San Ildefonso y Santiago, Amealco. El traje del hombre es el que siempre tiene la tendencia a desaparecer primero, porque el hombre era el que salía del pueblo e iba adoptando costumbres de otros lados, de la misma ciudad”.

Pero los cambios de vestimenta también eran por las reglas que las costumbres sociales marcaban.

“Me contaba una de las personas de Corregidora, que había unos retenes, cuando la gente veía a vender sus cosas a Querétaro, que sobre todo era el hombre, y si lo veían con su calzón de manta o vestimenta tradicional, no lo de dejaban pasar, entonces tenían que alquilar trajes, camisa y pantalón, para poder pasar, por eso desapareció más pronto el traje del hombre que el de la mujer, porque ellas eran las sumisas, las que tenían que estar en la casa”.

Google News

TEMAS RELACIONADOS