En 2018, Jerónimo Palomares presentó en Galería Libertad un proyecto personal en el que abordó su regreso a Sonora, teniendo a la fotografía como testigo de la historia, la nostalgia y la memoria. Ahora, el antropólogo y especialista en artes visuales, presenta la continuidad a su proyecto de memoria, se llama “Caudillo”, y se expone en el Museo de la Ciudad, en donde permanecerá hasta el 27 de febrero.

“Caudillo viene de un proyecto autobiográfico que ya había presentado aquí; en mi trabajo siempre plasmo dos conceptos: la ausencia y la memoria, con relación a la paradoja del padre ausente, siempre ha sido constante en mi obra”, explica en entrevista a EL UNIVERSAL Querétaro.

El Caudillo aún ‘rige’ en el Museo de la Ciudad
El Caudillo aún ‘rige’ en el Museo de la Ciudad

Luego de leer “La sombra del Caudillo”, obra del escritor mexicano Martín Luis Guzmán, que aborda la sucesión presidencial en el México, en donde destaca la figura de Francisco R. Serrano y Álvaro Obregón, su amistad, sus intereses políticos y la traición por la ambición del poder, Jerónimo comenzó a planear su exposición de “Caudillo”, que incluye fotos de paisaje, retrato, foto intervenida y una pieza de video sobre el tren, como emblema de la Revolución Mexicana y el desarrollo de un país.

“En ese libro de La sombra del Caudillo me encuentro con la metáfora de la figura del padre ausente, pero en esta cuestión del caudillo como el “Padre” que va a resolver los problemas de una población, pero que posteriormente se vuelve un dictador, y en México venimos arrastrando esas cuestiones de ausencia en las instituciones, es una especie de reflejo de lo que venimos cargando desde el caudillismo hasta nuestra actualidad”.

En el cartel publicitario de la exposición de Palomares, se ve la fotografía de un fuerte en el que se “escondían los obregonistas para combatir a Carranza y los Villistas”, explica el mismo fotógrafo. Pero además de la historia que evoca en su obra, las imágenes muestran una metáfora de la ausencia y la presencia del mundo que vivimos desde el punto social, la ausencia de política y la presencia de la violencia”.

El proyecto de “Caudillo” fue desarrollado con el apoyo cultural PECDA SONORA, creador con trayectoria 2021-2022. Jerónimo realizó fotografía y video, recorriendo varios lugares de Sonora, así encontró una hacienda que perteneció a los tíos de Obregón y “me pude encontrar con los sobrinos nietos de Álvaro Obregón, les hice retratos, video, viven en una extrema pobreza”.

El expresidente de México entre 1920 y 1924, detalla, “empieza siendo un gran agricultor, se vuelve docente y le interesa la población, las comunidades, sí tenía la vocación de interesarse en el otro y ya estando en el poder cambió, como muchos otros”.

La exposición incluye una pieza sobre el tren, “a partir de esta pieza de video me interesa reflexionar desde del ferrocarril como un elemento intrínseco de la Revolución Mexicana, que atravesó el tiempo del progreso desde el siglo XIX al siglo XX; un camino de proyectos para un bien común que constantemente se fueron derrumbando por intereses individuales de poder. La ausencia de una estructura institucional social se ha ido conformando por una larga lista de personajes que han ocupado diversos cargos políticos; herencia de figuras de la Revolución como los generales Álvaro Obregón y Francisco R. Serrano”.

Al cuestionar a Jerónimo, si ya terminó su investigación sobre la memoria, responde “apenas estoy iniciando”.

Tiene contemplado hacer registro de foto y de video en todo el sur de Sonora, y en aquellos lugares que tuvo presencia Álvaro Obregón. De la investigación que realiza, explica que puede salir un foto libro, un documental, y hasta está interesado en realizar un doctorado con este tema que permite ir de lo íntimo a lo social y derivar en lo político.

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