En mayo de 2019 abrió la Central de Cultura Compartida (CCC), espacio independiente que se ubica en el Centro Histórico de Querétaro, ahí se han presentado eventos de festivales internacionales como CutOut Fest, Hay Festival, Ambulante, y ahora está en riesgo de desaparecer.

A través de una campaña en Kickstarter piden apoyo para recaudar fondos que les permitirán pagar permisos municipales y adecuaciones que exige Protección Civil. Son aproximadamente 200 mil pesos los que contemplan de gasto por estos conceptos y los socios de la CCC abiertamente dicen: “no tenemos dinero”.

“Abrimos en mayo de 2019 y le hemos dado vida con el tiempo, le hemos puesto dinero, tiempo, cariño para que esto funcione, pero como somos independientes, autónomos, y todo nuestro dinero está invertido aquí, no hemos encontrado una válvula de escape para seguir, siempre es el dinero lo que más nos hace falta y justamente por esa misma razón decidimos meter esta campaña de Kickstarter para pedir donaciones y que nos ayuden a salvarlo”, explica a EL UNIVERSAL Querétaro, Rafael Ontiveros Aper, artista plástico y director de la Galería Diegorose.

La campaña está activa, han recaudado poco dinero y el tiempo se agota para lograr la meta.

“Estamos tratando de no perder la esperanza para los días que nos quedan de campaña, estadísticamente tendríamos que ir mejor, al momento tenemos como un 20% aportado, que no es nada, y si no reunimos todo no nos dan nada, Kickstarter funciona así, tiene que entrar toda la meta propuesta o si no, no te dan nada. Sí creemos que es posible que con el apoyo de la comunidad logremos salvar este lugar, que no hay ninguno en su tipo aquí en Querétaro, sí hay otros espacios culturales pero el nuestro se distingue de los demás”, añade la comunicadora y gestora cultural Estefanía Palacio.

La Central de Cultura Compartida nació con el concepto de ser un espacio cultural independiente en la ciudad de Querétaro, “donde la comunidad creativa se reúne a dialogar, colaborar, aprender y disfrutar alrededor de manifestaciones artísticas y culturales contemporáneas”.

Librería Submarino, Galería Diegorose, Hackerspace Kernel Panic Room (KPR) y un Jardín Botánico de usos múltiples forman parte de la CCC. En este espacio se han presentado eventos de Hay Festival, Editorial Sexto Piso, Tierra Adentro, Ambulante, CutOut Fest, Secretaría de Cultura, Universidad Autónoma de Querétaro, así como Mónica Nepote, Martha Mega, Yolanda Segura, Román Luján, Ismael Velázquez, Santiago Boldó, Esmeralda Torres, Gabriela Martínez, Salvador Herrera, Broken English, Belafonte Sensacional, Gravity Funk, Paulina Parga, entre otros artistas.

En octubre de 2019 se constituyeron como asociación civil, con la idea de darse de alta como donataria pero aún no tienen dinero para crear la cuenta bancaria que les permita realizar este ejercicio. En diciembre, por la falta de los permisos, el espacio fue clausurado.

“Sin licencia hacíamos exposiciones, conciertos, entonces nos clausuraron en diciembre por la falta de licencia de funcionamiento. Por los permisos y hacer las adecuaciones de Protección Civil son cerca de 200 mil pesos, gran parte de lo que se recaude en Kickstarter es para formalizar los permisos que nos piden y poder seguir funcionando sin ningún riesgo de que nos vuelvan a cancelar, pero como nosotros no tenemos los medios, decidimos recurrir a la comunidad cultural y artística”, dice Palacio.

Los socios de la CCC son queretanos y su apuesta con este proyecto es sumarse a la actividad cultural de la ciudad con un espacio abierto a todos los artistas y a todo público.

“Es un espacio hecho para la sociedad”, agrega Ontiveros. Y de la comunidad cultural han recibido donaciones de productos que servirán como retribución para quienes apoyen en esta campaña.

“Sí hay apoyo, lo que no hay de nuestra misma comunidad es dinero. Y queremos destacar que no podemos dejar un proyecto que es muy necesario en la ciudad, nosotros nos damos cuenta que es muy necesario porque diario nos escriben al menos tres personas que tienen una idea para hacer aquí un festival de música, cine, que necesitan una sede, diario vemos que existe la necesidad de tener un espacio como este y sería una lástima que lo dejásemos morir”, expresa Estefanía.

En Kickstarter se pueden encontrar todos los detalles de la campaña de recaudación de la CCC, conocer el proyecto y los planes que tienen a futuro. La fecha límite para donar y sumarse a este espacio cultural es el 13 de marzo.

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