Podría decirse que por una cucaracha Ana Claudia Talancón (36 años) entró al cine hace dos décadas.

“Me acuerdo que para El cometa me hablan para hacer casting y debía ir vestida de época; no supieron decirme cuál y entonces le rogué a mi papá que me prestara 200 pesos para rentar un vestido de princesa y me lo dieron con crinolina y corona”, recuerda.

“Llegué al casting y les pregunté dónde me podía cambiar porque llevaba vestuario. Salgo y se atacan de la risa y Maryse (Sistach, la directora) me dice: canta y baila ‘La cucaracha’.

“Como yo había tomado clases de folclore en mi escuela pues lo hice y resulta que era una de las escenas más importantes de la película y ¡pues me dieron el papel!”, narra la actriz.

El cometa, protagonizada al lado de otro joven llamado Diego Luna, fue su debut en la pantalla grande.

Desde entonces, prácticamente la cancunense ha vivido en los set cinematográficos teniendo en el inter una breve aparición televisiva con Al Norte del corazón, Señora y Romántica obsesión en Televisión Azteca.

Desde entonces ha participado en 24 producciones fílmicas como la controvertida El crimen del Padre Amaro y la hollywoodense Amor en los tiempos del cólera, adaptación de la novela escrita por Gabriel García Márquez.

El 2016 viene cargado de cine. El 11 de marzo estrena el thriller Paraíso perdido, posteriormente Refugio, ópera prima de Demian Bichir y en agosto, tentativamente, American curious, comedia romántica hablada en inglés y español, cuyo rodaje terminó hace unos días.

Para este filme rodó escenas en la línea 2 del metro de la ciudad de México, un viernes por la noche, y en el mercado de la Merced entre semana.

“Me he subido muchas veces al metro y en la Merced adopté a mi gatita; bueno, la saqué de una veterinaria que se había llevado a los gatitos de ahí”, explica la actriz.

En estos años ¿qué has llegado a hacer para estar en una película?

Un vez me tocó hacer un cortometraje de muda y entonces aprendí algunas cosas de cómo comunicarse, pero tuve que guardar silencio por una semana más o menos. Donde más le he sufrido fue con Arráncame la vida, hice casting siete años seguidos y cada año sufría porque suponía que se lo daban a otra persona y no a mí.

¿Te pasó que al ser reconocida te comenzaron a salir amigos y familiares que no conocías?

(Risas) Pasa que la gente se divide en dos: los que te adoran y aman aun más y los que no te querían y ahora también te quieren. Compañeros de escuela que me decían que íbamos juntos y que me ponen una cara de que si yo no lo recordaba era la peor payasa del mundo. ¡Pero cómo acordarme si iban cuatro años atrás que yo!, ¿cómo iba a acordarme de ellos?

Lo que me pasó mucho es que hubo gente que me comenzó a odiar y me decía que no esperara que me hicieran reverencia. Yo nunca he esperado que alguien me trate mejor que a otros.

Hay actores como Karla Souza (Nosotros los nobles) y Joaquín Cosío (El infierno) a quienes les piden en la calles repetir frases de sus personajes ¿a tí?

Para muchos soy Charly (de la serie Soy tu fan), le tiran buena onda y por ende, a mí (risas). También me reconocen mucho por la película El crimen del Padre Amaro, pero nunca me ha tocado que quieran que le diga a alguien: “Padrecito”; y que yo les conteste: “confiésate mi rey” (risas).

¿Cuál es la mentira más grande que han dicho de ti en los medios?

La verdad es que ya ni me acuerdo y la verdad qué bueno. El crimen del Padre Amaro fue la mejor escuela para entender que hacer cualquier tipo de comentario a favor o en contra de algo siempre es publicidad.

Google News

TEMAS RELACIONADOS