¿Quién se resiste a un par de huevos estrellados con tres lajas de tocino bien doraditas para comenzar el día? El tocino es una de las carnes saladas y conservadas que más se venden y consumen en el mundo. Su sabor salado y grasa propia de la carne lo hacen irresistible, tanto, que casi a cualquier platillo se le puede agregar para darle un toque especial.

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Antes de iniciar con el desarrollo de las tres deliciosas recetas con tocino, es importate aclarar que no es lo mismo el tocino y la panceta. El tocino o bacon se desprende del cuerpo del cerdo que tiene más grasa y su sabor es intenso, es por ello que su presencia es común en la gastronomía internacional. Su preparación es ahumada y salada.

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Por otro lado, el corte de la panceta es regularmente en círculos, además, contiene menos grasa y más carne. Su procedimiento de elaboración es distinta al tocino, pues ésta lleva pimienta, sal y a veces hierbas aromáticas. En España la distinguen porque es más cruda que el tocino.

Botana de jalapeños con tocino
Ingredientes
12 chiles jalapeños grandes, partidos pro la mitad y sin venas
Media barra de queso de cabra (puede con ceniza o no)
Perejil finamente picado
Un paquete o 150 gramos de tocino fresco
Palillos de madera
Pimienta

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Primero, los chiles se lavan muy bien y se parten a la mitad. Recomendamos sacar las venas con la ayuda de una cuchara pequeña para evitar el ardor en las manos; también puedes hacerlo con guantes. En caso de que prefieras utilizar tus dedos, deberás lavarlos inmediatamente para evitar un accidente y llegar a tocarte la cara o los ojos. Arde.

Después, se suaviza el queso de cabra con un tenedor o con la misma cuchara y se le agrega el perejil picado. Se realiza una mezcla que puede aderezarse con un poco de pimienta recién molida. Con esta pasta se rellenan bien los chiles con la ayuda de la cuchara y se forran con tocino. Es recomendable ponerle mínimo tres rebanadas por chile para que quede bien doradito y con bastante carne.

Al final, cada chile se fríe en una sartén o se asa y se emplatan juntos para una suculenta presentación. Provecho.

Col morada con tocino y manzana, chef Jamie Oliver
Ingredientes
1 cebolla
1 col morada
2 manzanas 
2 rebajadas de tocino ahumado 
½ un manojo de perejil fresco 
Aceite de oliva
1 cucharada de semillas de hinojo
150 ml de vinagre balsámico
1 cuadrito de mantequilla sin sal

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Primero se debe cortar la cebolla en cuadritos. Posteriormente se retiran las primeras hojas dela col y el resto se rebana completamente.

Después se pelan las manzanas y se cortan en pequeños cuadros de 2.5 centímetros, aproximadamente. También se desinfecta el perejil y se pica finamente.

Al final, el tocino se corta finamente.

A una sartén a fuego medio se le pone un chorro de aceite de olivo y se añade el tocino y las semillas de hinojo y se fríe todo hasta que esté bien doradito. Luego se agrega la cebolla y se tapa por unos minutos de 5 a 10 minutos.

Al término de este tiempo, se suma la manzana picada y toda la col rebanada. Se sazona con sal marina, pimienta negra y vinagre. Revuelve bien y la sartén se vuelve a tapar con el fuego más bajito. Esta mezcla se debe revolver ocasionalmente durante 45 minutos o una hora, el resultado debe ser un guiso pegajoso y dulce.

Para emplatar, una buena porción debe ser servida y se le pone el cuadrito de mantequilla encima, se le espolvorea más perefil y listo.

Sopa de tortilla con tocino
150 gramos de tocino 
Un kilo de tortillas secas y cortadas en cuadritos
Cilantro limpio
Cinco jitomates limpios 
Un litro de caldo de pollo natural
Una cebolla picada 
Queso panela o queso fresco 
Tres chiles pasilla fritos y troceados
Crema fresca

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Primero, en una cacerola, se fríe el tocino hasta que quede doradito y se reserva. En la misma cacerola se pone a acitronar la cebolla y mientras eso ocurre, los jitomates limpios se asan, se pelan y se licúan. Cuando la cebolla está lista, se le agrega el puré de jitomate recién molido y se revuelve. Cuando todo está integrado se le suma el caldo de pollo y la cacerola se tapa para que hierva. Se sazona con sal.

Mientras esto sucede, las tortillas se fríen evitando que se quemen. Deben quedar doraditas y los cuadritos completos. Se reservan. Cuando el caldo está listo, se apaga el fuego. En un plato profundo se sirve una cucharada de caldo, encima un puñado de tortillas doradas, un poco del chile pasilla frito y espolvoreado, una pizca de cilantro picadito y otro poco del tocino frito. El queso y la crema se ponen al centro de la mesa para que cada comensal lo agregue al gusto.

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