A sus cortos 22 años, Ilan Vainer ha dado importantes pasos dentro del mundo empresarial. Actualmente forma parte de un equipo de jóvenes emprendedores que con su ejemplo se encargan de promover importantes proyectos en este ramo, y convencer de que lo mejor que se puede hacer con el dinero es invertirlo para generar un patrimonio, antes de los 30 años.
En exclusiva con EL UNIVERSAL Querétaro, Vainer compartió su experiencia dentro de este ramo y su visión desde una industria, que se desarrolla a la par que la financiera en este país.
¿Cómo fue tu inicio dentro de este sector?
Cuando tenía apenas 15 años, comencé trabajando en el área de operación y ventas en una empresa de detergentes que pertenecía a un tío. Pero fue hasta que incursioné en el negocio de mi madre, quien posee una inmobiliaria, que el tema me apasionó
y me empujó a sumergirme en la parte comercial, además de la distribución y promoción de portafolios inmobiliarios.
Desde entonces pienso que es el negocio más bonito que hay, porque el tabique es indispensable, siempre va a haber necesidad de vivienda; el humano siempre necesitará un techo para vivir.
Y actualmente ¿dónde desarrollas tu labor?
Trabajo en G Group, para Alex y Alberto Guindi, quienes han enfocado su empresa en cuatro gremios de lo inmobiliario: comercial, industrial, residencial y oficinas. Hace un año que colaboro con ellos y desde entonces he estado implicado en cinco proyectos.
Cada quien juega su posición en el campo, definitivamente Alex es el portero y delantero del equipo, él es el fundador y quien ha hecho de G Group, un esquema para inversionistas con visión.
¿Qué caracteriza tu trabajo?
Mi esquema de atención es muy particular. Cada cliente y propiedad tiene sus características, por lo que mi política no puede ser rígida.
Además, pienso que tengo mucho ímpetu en este tema, siempre he tratado de contagiar a las personas con la cultura de la inversión, ya que todos pueden hacerlo, la gente piensa que no hay dinero, pero si esos gastos hormiga se planifican, cuando menos te das cuenta ya tienes un inmueble, aunque sea pequeño. Si siempre dices que no hay, y al mismo tiempo te estás comprando una tele, pues nunca va a haber.
¿Quiénes son tus clientes?
Mi cliente más joven tiene 24 años. Él me compró un departamento, y a él, en específico, lo acompañé desde el trámite de financiamiento y hasta nos fuimos a Cancún a ver la propiedad y todo. Los de esta generación ya sabemos que en el negocio de los inmuebles, hay una ley infalible que dice que puede que no ganes pero de que no pierdes, es seguro.
¿Cómo se puede promover la inversión entre los jóvenes?
Se tienen que visibilizar los casos de éxito. Hay que hablar más del gol que de la lesión y fomentar esa idea de admirar a gente que ha hecho cosas importantes.
Por ejemplo, Andrew Carnegie creó la idea de construir con acero; nadie se imaginó que era posible. Pero el sí, porque quería construir un puente para cruzar un río que incentivara el desarrollo del mercado y hasta la fecha, el edificio en el que estás, es de acero. Él como otros, me marcaron desde los 16 años. Yo no leo novelas, yo leo casos de éxito.
¿Cuál es tu visión de vivir bien y mejor?
Salud física, mental, familiar, social y financiera totalmente. Se debe tener salud financiera para no enfermar tu cartera. Si ganas, hay que reinvertir.
¿Cómo se mantiene una cartera sana?
Invirtiendo, sobre todo en zonas de crecimiento. El mejor momento para comprar es cinco años atrás, siempre hay manera de hacerse de un inmueble o de invertir, o bien, de abrir una comercializadora de inmuebles o de cualquier producto. Los jóvenes que desean hacerlo, deben averiguar cómo colocar su dinero, blindarlo y generar una utilidad o plusvalía para su futuro, antes de los 30 años.
¿Y G Group cómo cumple con la visión de promover una calidad de vida?
En Corporativo Uptown, que se caracteriza por el diseño de espacios que sacan de la rutina; cuando estás trabajando puedes subir al roof garden a relajarte y echarte un cafecito con una vista de 360 grados hacia el paisaje queretano.
También destaca por su concepto fit, que va más allá de una rutina corporativa. Se abarca también el área alimenticia y otros aspectos que elevan la calidad de vida de los trabajadores.
Hay muchísimos filósofos de la administración que señalan que la comodidad humana tiene que incentivarse para generar mejores rendimientos. Lo que hacemos es justo eso, nuestro actuar se rige bajo una combinación perfecta entre calidad corporativa, calidad de vida e imagen exclusiva y profesional.
AR
