Sociedad

Sin hogar, 20 familias en Arroyo Real

Anuncian reubicación de damnificados tras desbordamiento de ríos Jalpan y del Real

FOTO. ESPECIAL
15/10/2025 |08:39
Javier Hernández
Reportero EL UNIVERSAL Querétaro Ver perfil

Alrededor de 20 familias de la localidad Arroyo del Real, en el municipio de Jalpan de Serra, enfrentan una situación crítica luego de que el desbordamiento de los ríos Jalpan y del Real destruyera parte de sus viviendas, muchas de ellas construidas con materiales frágiles como lámina y cartón.

A unos días de la emergencia, los damnificados aún no saben si el anuncio de reubicación hecho por el gobernador Mauricio Kuri se concretará. Lo único seguro, dicen, es que ya no podrán regresar a donde vivían.

“Nosotros nos subimos porque cuando iba aumentando el arroyo no nos dio tiempo de sacar nuestras cosas. Cuando vimos que venía el agua, nos llegó a la cintura y nos tuvimos que salir como pudimos”, relató María Guerrero, vecina del lugar y madre soltera de cuatro hijos.

Te podría interesar:

FOTO. ESPECIAL

Cuenta que vive con sus hijos, su nuera y su consuegra —ocho personas en total— y que tras 16 años de habitar en esa zona, hoy no tienen a dónde ir. “Nos dicen que nos van a reubicar, esperemos que sí. No estamos aquí por gusto; si tuviéramos a donde irnos, ya lo habríamos hecho”.

Mientras tanto, las familias permanecen en la parte alta de la comunidad, resguardadas en espacios improvisados. Algunas se niegan a dejar el lugar porque no quieren abandonar a sus animales o porque no tienen certeza de recibir apoyo.

El gobernador manifestó anteriormente que la situación en la Sierra es una de las más complicadas que ha enfrentado su administración. “Primero, la emergencia, cuidar a la gente. No hemos escatimado en maquinaria, despensas ni personal. Son ocho municipios lastimados, los más complicados son San Joaquín y Pinal de Amoles”, dijo Kuri, quien destacó el trabajo coordinado con la presidenta Claudia Sheinbaum.

Lee también:

A sus más de 60 años y con problemas de salud, Francisca Trejo Guerrero, vecina de la zona, aún tiembla al recordar la noche en que el río del Real se desbordó. Dice que nunca imaginó que el agua llegaría tan rápido, ni que su casa —donde vivió por 20 años— quedaría inhabitable.

Te recomendamos