El Día de Muertos tiene su origen desde la época prehispánica, pero también católica que llegó con la Colonia, con la representación de la “muerte niña”, en ese entonces se decía que la muerte física era el acceso a la vida verdadera y que para quienes no tenían fe, no había salvación, por lo que eran condenados a las tinieblas. Los que morían en pecado tenían la posibilidad de alcanzar la vida eterna a través del purgatorio, por lo que se fue sincretizando con la cultura de los pueblos originarios.
Estas fechas son días de tradición y honra hacia los muertos, pasando de generación en generación en las comunidades indígenas, donde los muertos conviven con los vivos, desde finales de octubre hasta el 2 de noviembre, los muertos son venerados; esta tradición se enmarca con catrinas, altares y ofrendas, con flores de cempasúchil, pan de muerto, papel picado, danzas, música, platillos típicos de cada región de nuestro país, con veladores para guiar a nuestros muertos a Mictlán, llenando de vida las calles y los alegres panteones, así de increíble se disfruta en nuestro país.
El Día de Muertos es una de las festividades más importantes de México, se celebra la parte donde de manera transitoria los muertos se dirigen hacia una nueva vida.
La representación de la muerte en los pueblos mesoamericanos es muy antigua, lo puedes ver lo puedes ver en la cultura mixteca, azteca, zapoteca y no solamente en Mesoamérica, también en las culturas sudamericanas.
El tema de la muerte es parte importante en las artes y en la cultura de México, se dice que la primera catrina la creó Diego Rivera con su mural en el museo del Prado; sin embargo, a quien se le reconoce todo su trabajo como caricaturista y precursor en el grabado, destacando a la catrina —como tema recurrente hablar de la muerte— es a José Guadalupe Posada, quien a través de su creatividad e imaginación ha representado a México a nivel mundial a través de las décadas con su obra.
Con su trabajo al ilustrar las famosas calaveritas fue el más conocido, es por eso que hoy en día se pueden ver cientos de escenas de esqueletos en situaciones cotidianas, simplemente, disfrutando de la “vida”.
Se habla de muchas formas de la muerte en muchos sentidos, se dice que la mejor forma de recordar la fuerza de la vida es ante la muerte, y en estas fechas es un excelente pretexto para disfrutar de esta celebración que nos identifica.
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