Residencial Balvanera accedió a un convenio de colaboración (aún sin firmar) para resarcir el daño a la zona en donde construyó sin tener permisos ambientales, informó Guillermo Haro Bélchez, titular de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

El funcionario federal explicó que luego de que la autoridad resolvió embargar 86 hectáreas e imponer una multa por 48 millones de pesos, la firma residencial buscó mecanismos alternativos de acuerdo para finiquitar el proceso jurídico.

Eso implica que debe resarcir el daño ocasionado en aproximadamente 20 mil hectáreas en el municipio de Corregidora en 2012, donde la desarrolladora removió masa vegetal sin la autorización de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

El funcionario expresó que su objetivo es lograr que se repare el daño en suelo forestal, es por ello que firmarán un convenio en el que se fijarán los términos que debe cumplir la empresa para finiquitar el tema.

Papel en blanco. Sin embargo, los términos aún no quedan definidos; eso implica, por ejemplo, determinar la cantidad que debe aportar la empresa para lograr reparar el daño.

“En los términos del convenio estamos analizando las opciones del impacto ambiental que deberá ser igual al beneficio y en proporción al daño ambiental (…) a petición de la empresa encontraremos una solución que dé camino al desarrollo inmobiliario y el beneficio al medio ambiente”, señaló.

Actualmente hay un embargo de las 86 hectáreas y una garantía de 48 millones de pesos correspondiente a la multa total que prevé la Ley Federal de Responsabilidad Ambiental; la ley prevé que los fondos deben ser suficientes para cubrir los daños.

En Querétaro también se multó a otra empresa por la deforestación de seis hectáreas en la zona de Peña Colorada, a la que se impuso una multa de 2 millones de pesos; hasta ahora se trata de los dos casos recientes en la entidad, afirmó el funcionario federal.

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