Braulio Guerra Urbiola es diputado federal por el PRI, sin embargo, algunos de sus amigos lo ven actuando como si fuera “de oposición”.
En marzo pasado, el legislador trepó al muro construido en la frontera con Estados Unidos, en protesta contra Donald Trump; además, recientemente declaró non grato en la entidad al secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza.
La razón de esto último –explica Guerra a este diario– es que “no podemos seguir soportando el infierno del tráfico que tenemos sobre la carretera 57 ni la falta de aprecio por los queretanos que ha demostrado el titular de SCT, al no haber resuelto un problema que le ha costado la vida a muchos. Aunado a ello, aún tenemos el pendiente del tren, que sigue suspendido”.
Para Braulio Guerra, ha llegado el momento de analizar “todo lo necesario”, tanto por parte del gobierno federal como del gobernador Francisco Domínguez Servién para que “el viejo proyecto de un tren, que tiene 40 años en la memoria de muchos queretanos, se vuelva realidad.
“Desde los años 80 vengo oyendo que ya vamos a tener un tren que nos lleve y traiga con rapidez y seguridad a la Ciudad de México y hasta ahora no he podido ver ni sus luces”, se lamenta el legislador.
Para el diputado, una eventual reactivación del proyecto del tren podría darse en los términos en que se detuvo, a favor de la empresa China Railroad, “ajustando lo necesario.”
“En la mala coyuntura que enfrenta el país en su relación con Estados Unidos, y la postura negativa de Trump contra nuestros paisanos... el recuperar ese tren de alta velocidad en beneficio de una ferroviaria china sería perfecto para equilibrar nuestra relación comercial”, dice.
Y para el caso de que el suspendido proyecto tuviera que reformularse, Braulio Guerra también se muestra abierto.
“Lo importante es retomar lo del tren cuanto antes. Cada día que pasa, más inocentes mueren en esa infernal carretera”, sentencia.
