Este es un mal año para tramitar una cédula. El cambio de domicilio de la Dirección General de Profesiones y otras condiciones hicieron que se pasara de un plazo de dos o tres meses para obtener el documento a casi nueve meses. Además, en un par de casos extraordinarios hay retrasos desde el 2012.

Con los cambios de ubicación, las modificaciones en la nueva cédula profesional y el cambio de proveedor, Querétaro resintió los retrasos, aunque es de los estados menos afectados en todo el país, por la buena colaboración con la Secretaría de Educación estatal.

El titular de la Dirección General de Profesiones, Juan Pablo Sosa, informó que hasta el corte de agosto se tienen 3 mil 989 trámites de cédulas. De ese total, 2 mil 48 están en proceso.

Si antes un trámite tardaba 20 días hábiles o un mes, ahora puede tardar hasta 80; mientras que los documentos que duraban 80 días hábiles llegan a tardar hasta 120.

Con la finalidad de resolver el problema, se realizaron gestiones con la Dirección General de Profesiones y se le explica a los usuarios que hay dos direcciones, una del estado y otra general de la Secretaría de Educación Pública; de la última salen las cédulas, porque la estatal sólo es una dependencia gestora, para que la gente evite ir a la Ciudad de México.

“Los trámites estaban a nivel general atrasados, este ha sido un mal año para sacar la cédula, porque se cruzó con varias cosas: hubo un proceso de mudanza de la Dirección General de Profesiones. Ese cambio de domicilio teníamos la promesa de que no iba a causar ningún retraso y terminaron estando sin sistema cerca de dos meses”, admitió.

Ese retraso afectó a muchos profesionistas y se refleja en el hecho de que Querétaro está 20% debajo de la proyección para este año, frente a los trámites del 2015.

El año pasado se concluyó con 7 mil 820 trámites, de los cuales 75 todavía no concluyen y “los usuarios ya están un poco desesperados, porque es un documento muy importante”, subrayó.

Señaló que la molestia se debe a varias razones: muchos profesionistas desean continuar sus estudios y requieren la cédula; otros quieren conseguir empleos donde les piden la cédula, algunos más la ocupan para trámites en el extranjero o por cuestiones de calidad.

Con el fin de causarles el menor daño posible, la Dirección de Profesiones del estado extiende constancias de cédula y certifica que todo está en trámite, pero que hay retrasos.

Hasta ahora se extendieron cerca de 3 mil constancias de cédula, completamente gratuitas, para minimizar las afectaciones en los empleos o las escuelas.

Hay profesiones que presentan más problemas que otros, como en derecho, contaduría, medicina, odontología, enfermería, optometría, fisioterapia y todas sus especialidades, porque piden la cédula para poder ejercer y que tengan validez.

De ellos, los que más tardan son las especialidades médicas, porque se hacen en múltiples instituciones, como hospitales, y el sector salud tarda mucho en verificar si el interesado realizó o no su residencia.

Juan Pablo Sosa confió que con varios cambios que se realizan a nivel federal empiece, poco a poco, a disminuirse este tiempo de espera; pero todavía no está en el tiempo ideal.

“Los tiempos deben modificarse, deben reducirse, no es posible que un profesionista entre a un limbo donde ya terminó la escuela y no puede trabajar aún”, concluyó el director de Profesiones del estado.

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