El delegado de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), Aurelio Cigala Páez, calificó como positivo que el Congreso del estado determinara otorgar la medalla Nelson Mandela a la indígena Macedonia Blas, pues su caso fue un parteaguas para el reconocimiento de los derechos de las comunidades originarias en el estado.

“Me parece importantísimo que una mujer indígena, como Macedonia sea tomada en cuenta, porque a partir de que ella denunció que se le violentaron sus derechos y ventilar determinados usos y costumbres, que fue una violación que sufrió ella, se puso mucho más atención a los derechos indígenas, tanto en la Comisión Nacional de Derechos Humanos [CNDH], como en otras instancias, y es fundamental que se reconozca como indígena”, dijo.

Destacó que a partir de que se dio a conocer el caso de Macedonia; además del asunto de Jacinta, Alberta y Teresa, (detenidas y sentenciadas por el presunto secuestro de seis agentes federales) surgió un parteaguas que ha dado un giro a los derechos indígenas.

“Considero que se ha avanzado mucho. Si uno revisa cómo se encontraba el tema de los derechos indígenas hace 20, hace 10 años, incluso no sólo los derechos, sino también el apego a la identidad indígena y el orgullo a serlo es diferente al que se tiene hoy.

“Observo actualmente un orgullo por parte de los indígenas por autorreconocerse y autovalorarse. También de la sociedad, aunque sigue habiendo discriminación, un poco más de respeto y reconocimiento a la cultura indígena”, enfatizó.

Cigala Paéz precisó que en general, los líderes comunitarios y los promotores sociales comunitarios sí conocen los derechos indígenas, y cada año la CDI hace dos procesos de capacitación y reparten la Ley Indígena, para que la tengan y sepan que hay una norma; muchos acuden a la misma para hacer trámites y procesos de gestión ante las autoridades.

Por otro lado, sobre el caso de Eva María Pascual Julián, quien desapareció la noche del 29 de abril pasado, y cuyos padres, Nazaria Julián Santiago y Cirilo Pascual, recurrieron a las autoridades para denunciar su desaparición, pero en un inicio les fue negada la ayuda, argumentando que “se había ido con el novio”, el funcionario federal recordó que existe un acuerdo con la Fiscalía para que los casos donde estén involucrados indígenas sean atendidos de inmediato, y él tuvo conocimiento de este caso, porque acudieron también a ellos, para abrir la carpeta de investigación.

Por último, aseguró que no tiene conocimiento de más casos como el de Eva María.

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