Roberto Adame, coordinador de Acreditaciones y Servicios en Responsabilidad Social Empresarial del Centro Mexicano para la Filantropía (Cemefi), destacó que cada vez más empresas consideran implementar la responsabilidad social en su gestión de negocio, lo que se refleja en la entrega del distintivo Empresa Socialmente Responsable (ESR).

En este sentido, el Cemefi registra un crecimiento anual sostenido de entre 15% y 20% en la entrega del distintivo Empresa Socialmente Responsable (ESR), reconocimiento que este año fue otorgado a mil 529 empresas.

“Nosotros iniciamos en el año 2001 con 17 empresas y año tras año hemos hecho el proceso para otorgar el distintivo, con vigencia anual. En 2001 participaron un total de 28 empresas, de las cuales lo obtuvieron 17, y del 2001 para acá el número ha crecido a mil 520”, resaltó Adame.

Impulan equidad.

El Centro Mexicano para la Filantropía es el organismo líder en temas de responsabilidad social y filantropía en México.

La misión de esta organización se enfoca en promover la responsabilidad social y la filantropía, con el objetivo de alcanzar una sociedad más equitativa, solidaria y próspera.

En Querétaro el centro trabaja de forma coordinada con la Fundación Roberto Ruiz Obregón para impulsar la responsabilidad social en empresas que operan en el estado.

Con esta intención, este viernes se impartirá un taller en las instalaciones de la fundación, el cual abarca el tema de la responsabilidad social en general, así como los ámbitos de la misma, la ética empresarial, la calidad de vida en el trabajo, vinculación con la comunidad y protección al medio ambiente.

“Este taller se ofrece a las empresas y a los organismos interesados en implementar la responsabilidad social dentro de sus organizaciones, para que ellos procuren hacer programas en beneficio a la sociedad y también en beneficio a sus empleados, de los familiares y de los accionistas o inversionistas.

“Se trata de un taller que se ofrece en diferentes partes del país, incluyendo la Ciudad de México, y en Querétaro vamos a impartirlo porque tenemos un aliado en el estado —la Fundación Roberto Ruiz Obregón—, que replica la promoción de responsabilidad social entre las empresas, tal como lo hacemos aquí en México”, expuso.

Obstáculos.

El coordinador señaló que si bien cada vez más empresas adquieren conciencia sobre la importancia de estos temas, aún se enfrentan importantes retos en la materia.

Uno de ellos, indicó, tiene que ver con la promoción de este concepto. “El área de oportunidad en la que estamos haciendo esfuerzos es en promover el conocimiento del tema. El cimiento de la responsabilidad social, que es el altruismo y la filantropía, ha existido desde siempre, pero como responsabilidad social empresarial tiene poco tiempo.

“Nosotros, a través de Cemefi, hemos venido otorgando el distintivo ESR a las empresas que manifiestan el compromiso público y voluntario de llevar a cabo programas de responsabilidad social empresarial”, sostuvo.

De acuerdo con el especialista, en México la mayoría de las empresas realizan prácticas de responsabilidad social empresarial, pero en muchos de los casos éstas no se tienen conceptualizadas o visualizadas como tal, por lo que se llevan a cabo de una manera desordenada o aislada.

En este sentido, Adame planteó que participar en el distintivo de Empresa Socialmente Responsable ayuda a las organizaciones a darse cuenta de qué es lo que están haciendo y a formalizar las prácticas que realizan de manera informal, desorganizada u ocasional.

“Las visibiliza, y al visibilizarlas como empresas socialmente responsables en un entorno de negocio se les abren las puertas para poder atender nuevos nichos y sectores de mercado”, expuso.

A través de esfuerzos de difusión como el que se realiza con la Fundación Roberto Ruiz Obregón, el Cemefi busca que este conocimiento llegue a un número cada vez mayor de empresas.

El reto actual para el centro tiene que ver con que entidades y dependencias de gobierno se incorporen como promotoras de la responsabilidad social empresarial, además de que empresas “grandes” volteen a ver la cadena de valor para integrar cadenas socialmente responsables.

“Finalmente, el interés que buscamos es una sociedad más justa, más equitativa, y apoyar a aquellos grupos que tienen situación de vulnerabilidad”, acotó Adame.

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