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Este fin de semana se detuvo al sacerdote acusado de abuso sexual en contra de un menor de edad que fungía como monagillo en un templo de la colonia de la Reforma Agraria.
Fernanda Lazo, presidenta de Corazones Mágicos, organización que apoya a las víctimas que sufren de este tipo de abusos, señaló que no se tienen evidencias de que este cura haya abusado de más menores.
Detalló que los hechos ocurrieron en 2019. El menor, indicó, “sufrió tocamientos y agresiones por parte de un sacerdote. Aparte de tocamientos, sufrió lo que se llama violación equiparada; estuvo abusando vario tiempo de este niño y el viernes detuvieron al sacerdote y ayer [sábado] se llevó a cabo la primera audiencia y se determinó que el sacerdote va a estar en prisión mientras pasa todo el proceso de investigación”.
Fernanda Lazo explicó que la gran mayoría de los agresores sexuales atacan constantemente de otros menores, y aunque no se tienen evidencias de que en este caso así haya sucedido, es algo muy común, por lo que, destacó, hay que considerar este perfil para este caso.
“Es importante que la gente que acudía a esta iglesia si saben de alguna otra sospecha que se denuncie, que se atienda a los niños… lo prioritario es la salud mental de los niños. Pensar que si no lo hablamos o no le damos seguimiento a un caso de esta naturaleza, los niños lo van a olvidar, es mentira. Los niños van a seguir con el daño y es importantísimo atender y velar por la salud mental de nuestros niños”, enfatizó.
Agregó que el menor víctima del cura ya terminó su tratamiento emocional en Corazones Mágicos, pero ahora se busca que tenga acceso a su derecho a la justicia.
La Fiscalía del estado, dijo, tuvo una actuación muy oportuna las últimas dos semanas, cuando se hizo público el caso.
Fernanda Lazo se reunió al mediodía con el vicario de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, aunque la reunión se tenía prevista con el obispo.
“La intención es iniciar el proceso canónico, el juicio canónico contra este sacerdote para que lo expulsen del Estado Católico”, abundó.
Antes, Lara Becerril explicó que la línea general que tiene la Iglesia Católica es de cero tolerancia para estos actos.
“Nosotros, por parte de todas las diócesis, con respecto a la autoridad civil, es de colaboración. Nosotros no podemos obstaculizar de ninguna manera cualquier investigación que se haga. Antes bien, nosotros estamos en la mejor disposición de colaborar con las autoridades civiles respecto a cualquier investigación”, subrayó.
En el terreno eclesiástico, recordó, se tiene en todas las diócesis una comisión que atienda este tipo de delitos.
En esta comisión se busca dar seguimiento a los procesos de los sacerdotes. Es el mismo principio de tolerancia cero y que sea un proceso justo.
“Un juicio de un abuso a un menor es de derecho pontificio, es decir es la Santa Sede la que lo juzga. En las diócesis es en donde se integran los expedientes y es la Santa Sede quien juzga, no es el derecho diocesano, es el derecho pontificio”, añadió el vicario queretano.
