La autoridad federal determinó que los despidos de 4 trabajadores de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), entre ellos Laura Leyva, fueron injustificados, por lo que se le deben restituir en sus puestos laborales.

El abogado del Sindicato Único de Personal Académico de la UAQ (SUPAUAQ), José Luis González Godínez, explicó que desde marzo pasado dieron a conocer que habían obtenido resoluciones favorables para algunos trabajadores despedidos de la máxima casa de estudios por parte de la Junta de Conciliación y Arbitraje.

“La semana pasada nos fue notificada una resolución de carácter federal, dado que en aquel momento obtuvimos las resoluciones por la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, a favor de las y los trabajadores, la autoridad administrativa de la universidad decidió ampararse en contra de estas reso luciones. El Tribunal Federal ha resuelto en cuatro de los casos que anunciamos en aquel momento y ha resuelto que efectivamente los trabajadores fueron despedidos injustificadamente”, apuntó.

Terror laboral. Laura Leyva dijo que a dos años de ser “injustamente despedida” de su trabajo recibieron una sentencia federal ratificando el laudo emitido en la Junta de Conciliación y Arbitraje. “El tribunal ha determinado que, efectivamente, nuestro despido fue injustificado en razón que la autoridad universitaria no probó la causa que invocó para justificar nuestra separación laboral”, subrayó.

Con esta resolución, continuó, queda evidenciado que el despido que sufrió, junto con Rosa Delia Hernández López, así como poco más de 50 trabajadores administrativos, “fue motivado por ánimo de represión ejercido desde los más altos niveles de la administración universitaria. Es necesario refrendar que nuestra legítima lucha no es en contra de la Universidad Autónoma de Querétaro, sino contra aquellos que precisamente la están perjudicando.

“En este clima de terror laboral, opacidad y autoritarismo que tienen en crisis a nuestra institución, hay un culpable y varios responsables. Con esta resolución también se pone de manifiesto que el culpable de esta ola de represión y persecución contra los trabajadores es el actual rector Gilberto Herrera Ruiz, aunque siga diciendo que no hay despidos injustificados. Aquí demostramos que miente”, sostuvo Leyva.

Subrayó que las órdenes del rector para despedir personal fueron ejecutadas desde diferentes áreas y por varios personajes de la administración central, y ejemplificó a Óscar Guerra, abogado general, pero en especial acusó a Aurora Zamora, directora de Recursos Humanos; Rocío Peniche, secretaria adjunta de la Rectoría, y Rosalba Rodríguez Durán, contralora interna de la UAQ.

“Para la administración universitaria que encabeza Gilberto Herrera, atrevernos a defender los derechos y la dignidad de los trabajadores universitarios es una afrenta, es un delito, pero hoy desde la resistencia, la lucha jurídica y sindical demostramos que ellos están equivocados, que nosotros siempre nos hemos conducido con legalidad y, por ende, siempre hemos tenido la razón”, enfatizó.

Agregó que nadie puede ponerse por encima de la ley o aprovecharse de las instituciones para cometer “fechorías” o injusticias.

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