Los delanteros de Gallos Blancos, Camilo Sanvezzo y Emanuel Villa, afirmaron que su regreso a las canchas no es la solución para acabar con el bajo rendimiento del equipo, aunque sí pueden incidir en los resultados, aunque también se “quedó a deber” por la salida de jugadores estratégicos del club, al tiempo que el brasileño aseguró que saldrá a la banca.

Tras el entrenamiento de ayer, Emanuel ‘Tito’ Villa comentó que el partido de esta noche es fundamental, pues mientras las matemáticas den posibilidades de clasificar, buscarán colarse a la Liguilla.

“Mientras los números den, la esperanza es lo último que se pierde, y este equipo ha tenido alguna experiencia en ese aspecto, es difícil imaginar conseguir todos los puntos cuando dejamos ir tantos a lo largo del torneo, pero tenemos que ir paso a paso”, indicó.

Comentó que hoy, ante un rival que pasa por buen momento y que llega motivado por llegar a la final de la ‘Concachampions’, para Gallos no hay mejor oportunidad para sumar en pos de la clasificación.

Agregó que todos en el equipo están molestos con esta situación, pues no hace mucho el equipo pasó por un buen momento, cuando llegaron hasta una final, por lo que la exigencia está también en ellos mismos, además de que agregó que ya se verá la próxima temporada cómo replantean al equipo.

Por su parte, Sanvezzo dijo que se encuentra contento de estar de vuelta, poder entrenar, jugar unos minutos, y más ante un equipo de jerarquía, como lo es América, que además es dirigido por Ignacio Ambriz, ex técnico del Querétaro.

Añadió que a pesar de tener una buena amistad con William da Silva, ex jugador de Gallos, en la cancha son adversarios, además de que aclaró que su contrato vence en diciembre, pero confía en quedarse mucho tiempo con el cuadro emplumado, pues tanto él con su familia se sienten a gusto en la ciudad.

Apuntó que siempre es bueno volver a jugar, y ante un equipo grande motiva más para tratar de sacar la victoria, al tiempo que afirmó que está listo para volver ante América, aunque sea por unos minutos.

Ambos jugadores coincidieron en que el partido de hoy no representa más que tres puntos y una alegría para la afición queretana en casa, que ha sufrido con el equipo los malos resultados.

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