En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL Querétaro se pudo constatar que en las calles del Centro Histórico de la ciudad existen 130 comercios establecidos, con sólo 32 viviendas habitables, de las cuales dos parecen estar deshabitadas; así como un estacionamiento.
En la calle de Juárez en el tramo que va de Universidad a Pino Suárez, hay 50 comercios y solamente se localizaron dos casas; en avenida 16 de Septiembre entre las calles de Guerrero y Juárez hay más de 30 locales comerciales, dos casas habitadas y un estacionamiento.
En Independencia en la intersección de Corregidora hasta el Templo de la Cruz, se encuentran establecidos 50 locales comerciales, 28 casas habitación de las cuales dos están aparentemente deshabitadas.
Ante el crecimiento desmedido que se ha presentado en la zona del primer cuadro de la ciudad, el secretario de Desarrollo Sustentable (Sedesu) del municipio de Querétaro, Ramón Abonce Meza, destacó que está situación pudiera generar un ambiente de inseguridad.
Detalló que derivado de que las viviendas habitadas cada vez son menos, en un determinado horario, cuando todos los establecimientos están cerrados, pudiera ocurrir un atraco sin que nadie se de cuenta.
Los rubros de los comercios establecidos son: ropa, papelerías, panaderías, librerías, restaurantes, bares, venta de artículos para el cabello, de limpieza, entre otros.
Informó que este fenómeno se da en las ciudades con un crecimiento económico acelerado, lo cual de no ser controlado puede generar un desequilibrio.
Esta situación, asentó el secretario de la Sedesu, se debe a que ha incrementado el turismo de manera exponencial lo que hace que se genere más comercios y servicios para cubrir las necesidades de los visitantes.
“Muchas ciudades cuando empiezan a tener un crecimiento económico bastante acelerado, no es exclusivo de Querétaro. Es un fenómeno que se da debido a que existe una fuerte demanda social de más servicios, por otro lado se incrementa el turismo, como en el caso de la capital” señaló el titular de la Sedesu.
Abonce Mesa puntualizó que ya se llegó al “límite”, esto aún no es una situación que genere conflictos; sin embargo, el delegado en Querétaro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Manuel Naredo, advirtió que el Centro Histórico de la capital está en “condiciones críticas” ante el fenómeno de deshabitabilidad que vive la zona.
Destacó que el centro se está convirtiendo en una zona de servicios, de comida y se está perdiendo el equilibrio entre viviendas y comercios.
“Yo creo que todo centro debe tener un sano equilibrio. Que pueda ser un Centro Histórico vivo, donde la gente pueda ir, visitar, comer, disfrutar, pero también habitacional, porque si no hay habitación se va muriendo, de ahí que lo importante es fortalecer eso”, agregó.
En este sentido, Abonce Meza destacó que es importante que se generen mecanismos para evitar que esta situación siga avanzando y por ello la administración municipal contempla el fomento a la vivienda.