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El exgobernador Francisco Domínguez Servién afirmó que aunque el Partido Acción Nacional atraviesa un momento de retroceso en el escenario nacional, en Querétaro su fuerza se mantiene sólida y con amplias posibilidades de refrendar la gubernatura en 2027.
“Sin duda alguna el PAN seguirá gobernando Querétaro, la estructura y el respaldo ciudadano en la entidad continúan firmes”, dijo el exmandatario a pesar de que el partido pasó de once gubernaturas a cuatro.
Domínguez diferenció el panorama local del nacional: “Sigo pensando que están preparando el declive del PAN” en la dirigencia nacional, con la que asegura no tener contacto desde hace más de seis meses. En cambio, reconoció el trabajo del panismo queretano, con el que mantiene cercanía dando pláticas cada 15 días “a militantes y a ciudadanos, para que contrasten a Querétaro con otros estados gobernados por Morena, por MC y por el PRI”.
A su juicio, el reto para conservar la gubernatura radica en afinar el trabajo y demostrar a los ciudadanos que fueron a confiar en el PAN que hay resultados.
En ese proceso, dijo, será clave un método de selección de candidato que garantice legitimidad y no dependa únicamente de estructuras o movilización interna. “Si el método es ciudadano, me gusta. Hay que cuidar que no gane solo el que más estructura tiene, sino quien tenga un respaldo auténtico y orgánico”.
Ve también segura la retención de las alcaldías de Querétaro y de Corregidora, aunque insistió que el partido debe abrirse a la militancia, abrirse a la juventud y eliminar filtros como “ese examen que está más difícil que el de medicina aquí de la UAQ”.
Y consideró que la incorporación del exalcalde Armando Rivera a Movimiento Ciudadano (MC) tendrá un efecto limitado en el crecimiento del partido en Querétaro.
