Política

México no será rehén de EU: Francisco Domínguez

El país no es un botín electoral, señala

Foto: Especial
07/06/2019 |03:43Marittza Navarro |
Redacción Querétaro
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México no será rehén político de Estados Unidos, afirmó el gobernador Francisco Domínguez Servién, quien confirmó que acompañará al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en el acto para la defensa de la dignidad de México y en favor de la amistad con Estados Unidos.

Como presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), el mandatario estatal recibió la petición del Presidente de México para convocar a todos los representantes de las entidades federativas para estar en el evento de Tijuana.

“No vamos a permitir que se use a nuestro país como un botín con fines electorales de ellos, no de nosotros, nuestra visión va a ser construir (…), vamos a cerrar filas como país, no tengo duda que vamos a trabajar unidos para defender esa relación fuerte, bilateral, trilateral, pero que sea justa, amplia y muy profunda, con sentido económico igualitario para ambos países” indicó.

El evento, dijo, es un acto de Estado para la defensa del país, por lo que no debe haber distingo de partidos políticos. Recordó que hay gobernadores en Estados Unidos que no comparten la propuesta de Donald Trump de imponer aranceles de 5% a los productos mexicanos.

“Debemos respaldar este llamado del Presidente, y que hagamos un gran equipo de apoyo al equipo negociador, estoy seguro que nadie quiere que le vaya mal a nuestro país. Me llamó el Presidente de la República pidiéndome convocar a los 32 ejecutivos que forman nuestro país a acompañarlo, va a ser un evento de Estado, llamado a la unidad nacional”, explicó.

Aunque dijo que no adelantaría conclusiones, afirmó que México está listo para aplicar la “política espejo”, es decir, agravar las importaciones de los productos de Estados Unidos, lo que sería un golpe para los consumidores de ambos países.

El presidente Donald Trump ha anunciado que a partir del 10 de junio se aplicará un arancel de 5% a los productos de importación mexicanos, y aumentará ese porcentaje de forma paulatina si México no endurece las políticas migratorias.

“Si encontramos la cerrazón de allá, yo estoy convencido, aunque todavía hay que guardar prudencia, de estar listos para echar a andar la misma moneda, la política espejo a fin de responder a dichas medidas simétricas. No tengo [dudas que], desde Carolina del Norte hasta Texas, aplicar la política espejo le dolería a lo que aman los americanos y los mexicanos: al campo que consumimos”.