Los exgobernadores Francisco Domínguez Servién y José Calzada Rovirosa calificaron como positivo el primer año de gobierno de Mauricio Kuri, aunque ambos reconocieron que el principal reto que enfrenta la entidad es mantener buenos niveles de seguridad.

Entrevistados por separado al término del informe de Kuri González, Calzada dijo que el actual mandatario queretano ha hecho un buen trabajo y, pese a que se ha enfrentado a retos importantes, ha dado la cara y ha sabido mantener al estado con números positivos.

“El gobernador Kuri ha hecho un buen trabajo, es una gente sensible y cercana a la gente, ha tenido momentos difíciles, pero ante ellos ha salido, ha dado la cara, ha dado explicaciones y ha impulsado proyectos que tienen que ver con el progreso de la entidad”, comentó.

El exmandatario de extracción priista señaló que, independiente de colores o de personas, Querétaro es un estado de progreso y se nota, pues continúa siendo una de las entidades que más crece económicamente, además de ser un estado con paz y armonía.

“Tiene sus cosas, sí, todos vivimos circunstancias complejas cuando estuvimos en Palacio de Gobierno, pero afortunadamente los números de Querétaro suenan bastante bien. La seguridad siempre es un tema para mejorar, para mantener, si se tiene seguridad se puede pensar en prosperidad y futuro”, dijo.

Por su parte, Domínguez Servién, quien terminó su periodo hace poco más de 11 meses, señaló que la seguridad “sigue siendo el tema uno que le preocupa a los queretanos, al igual que “la infraestructura y el tema del agua”.

Respecto a la obra denominada Paseo 5 de Febrero, que el gobierno estatal desarrolla en la capital de Querétaro, Francisco Domínguez indicó que durante su gestión previó retirar el puente vehicular que está entre las avenidas 5 de Febrero y Zaragoza, con la finalidad de construir un eje estructurante para el transporte público.

Sin embargo, no fue aprobado por los comerciantes de la zona, por lo que celebró que ahora se vaya a retirar como parte del proyecto de movilidad.

Reconoció que al acabar su gobierno (2015-2021) faltaron acciones para mejorar el sistema de transporte público mediante la construcción de más ejes estructurantes y la incorporación de nuevas unidades, y refirió que se adquirieron 400 autobuses de origen chino.

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