El gobernador Mauricio Kuri González expresó su inconformidad tras la negativa de los legisladores locales a aprobar el proyecto del sistema El Batán. Señaló que esta decisión podría traer consecuencias en el mediano plazo, entre ellas la necesidad de recurrir a esquemas de tandeo de agua potable, situación que actualmente se enfrenta de manera temporal por el desfogue de la presa Zimapán.

“Me da mucho coraje porque es muy fácil destruir, decir. Y si no es esto habrá que buscar otras cosas; ya no me tocará a mí, pero se tendrá que encontrar una forma para garantizar más agua para el futuro”, declaró el mandatario, al insistir en la importancia de apostar por obras que aseguren el abasto líquido.

Kuri González recordó que Querétaro atraviesa un proceso de crecimiento poblacional y de desarrollo económico que exige soluciones de fondo en materia hídrica. Subrayó que la negativa al proyecto no elimina la necesidad de contar con alternativas que fortalezcan la seguridad en el suministro de agua. “El tema del agua no es algo que pueda postergarse; si no se aprueba un proyecto como El Batán, habrá que pensar en nuevas opciones que respondan a las necesidades de la población”, insistió.

El gobernador reconoció que el debate legislativo es parte de la vida democrática, pero pidió a los diputados analizar la magnitud de los retos que enfrenta el estado en esta materia. Aseguró que el agua debe asumirse como un asunto prioritario y de interés común, por encima de diferencias partidistas.

“Hoy tenemos un problema temporal derivado del desfogue de la presa Zimapán, pero mañana podría convertirse en una situación recurrente si no se invierte en proyectos de largo plazo. No podemos permitir que Querétaro se quede sin alternativas”, sostuvo.

Reiteró que, aunque su administración ha impulsado El Batán como una solución viable, sabe que la decisión final corresponde al Congreso.

Google News