En noviembre de 1916 Venustiano Carranza llegó a Querétaro, capital provisional del país, para comenzar las reformas a la Constitución de 1857; el jefe del Ejército Constitucionalista tenía la oportunidad de viajar en tren hasta la ciudad, pero prefirió bajarse una estación antes y entrar a caballo por La Cañada, esa decisión fue planeada para tener un mayor impacto visual.

“No fue una casualidad, alguien pensó muy bien eso y dijo: ¡Hay que llegar con todo! Querían expresar el poder y el poder tenía que personificarse, tenía que ser de impacto. ¿Y quiénes van a consagrar ese impacto?: los fotógrafos. Son ellos los que van a trasmitir cómo ver ese momento, cómo sentir incluso ese momento”, explica a EL UNIVERSAL Querétaro Guadalupe Zárate Miguel, directora del Centro Queretano de la Imagen.

La ciudad se llenó de militares, políticos, periodistas y personas que venían de todo el país, “estaba cambiando una nación y todos querían estar ahí”. Cada paso de Carranza y los Constituyentes era registrado por fotógrafos que llegaron a la ciudad, incluso del extranjero, todos corriendo con sus grandes cámaras, “que era como cargar su propia cruz, eran pesadas y los tripiés eran de madera, debían tener buena condición física, tenían que correrle si se les acababa la película y luego el revelado, no era como ahora con las cámaras digitales, que nada más hacen clic, clic, clic”, detalla la historiadora Zárate Miguel.

En el álbum interactivo de la Historia Gráfica del Congreso Constituyente”, creado por la Coordinación de Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México y disponible en internet desde el año 2011, incluye fotos oficiales, como las sesiones preparatorias en la Academia de Bellas Artes (hoy Teatro Esperanza Cabrera).

En la introducción de dicho álbum, dice que el “general Francisco J. Múgica comisionó la elaboración de una memoria fotográfica de la Asamblea Constituyente”. Y entre las fotos de los Constituyentes hay una de los periodistas y fotógrafos que cubrieron el trabajo del Constituyente, sus nombres: Carlos Quiroz, Pedro Mendoza, Jesús Gómez, José Mendoza, Agustín V. Casasola, Rafael Rentería, Patricio Healy, Ernesto Hidalgo y Rafael F. Sosa.

En todas las actividades del Congreso Constituyente de 1917 había fotógrafos, las imágenes más conocidas son las de Casasola y los hermanos Mendoza, pero también había queretanos. ¿Quiénes son y dónde están las imágenes de esos fotógrafos queretanos?

Concurso de foto para el centenario

Centro Queretano de la Imagen anunció a mediados de enero la convocatoria del Concurso Nacional de Fotografía Centenario de la Constitución, con dos categorías: Juvenil (tema: El disfrute de las garantías individuales; y Profesional (La aplicación del artículo 3° constitucional).

El cartel de la convocatoria, que estará abierta hasta el 10 de marzo y se puede consultar en la página de Facebook del citado centro, tiene como fondo una fotografía del día en que Venustiano Carranza llega a la capital del país caballo, entrando por el camino de La Cañada.

La decisión de ingresar a caballo en lugar de llegar en tren, dice Guadalupe Zárate Miguel, fue pensando en el impacto visual que se vería reflejado en las fotografías que publicarían los periódicos nacionales como extranjeros, que solicitaban las mejores tomas y las más significabas.

“Sabemos que Francisco Villa tenía contratos con camarógrafos norteamericanos, y que planeaban las escenas, y los fotógrafos mexicanos no se quedan atrás en planear las escenas, quizá no al mismo grado, pero sí hubo acuerdos; viendo la posibilidad de llegar en ferrocarril, Carranza se baja del ferrocarril y llega a caballo, porque visualmente es más poderosa la imagen de un jinete, barbado y poderoso, a la de un pasajero que desciende los escalones de un vagón”.

Ese día en que llegó el jefe del Ejército Constitucionalista a Querétaro, fue seguido por el pueblo y los fotógrafos, durante todo su camino. “Es un recorrido prácticamente cinematográfico, podemos hacer esa reconstrucción de hechos, porque la cantidad de fotografías de ese día son cientos”.

Zárate Miguel es autora de Imagen de la Revolución en Querétaro. Memoria de luz, la portada del libro es precisamente la llegada de Carranza a caballo, rodeado del pueblo; en el interior del libro se aprecia otra fotografía del mismo día, pero con un detalle icónico para la ciudad, porque se ve al pueblo en multitud, la polvareda que levantaron los caballos de Carranza y su comitiva, y de lado izquierdo el famoso acueducto de Querétaro.

El recorrido de Carranza continuó hasta llegar al centro de la capital, y de todo eso hay registro fotográfico. El arribo del jefe Constitucionalista fue el principio, los fotógrafos siguieron captando cada momento, tanto paseos, comidas, sesiones preliminares hasta llegar al 5 de febrero de 1917, día en que hace pública la Constitución de 1917.

Postales de la época, las más solicitadas

En el Querétaro de 1916 ya había estudios fotográficos y también era común ver en la ciudad a los fotógrafos ambulantes. La fotografía, en esa etapa histórica, incrementó su demanda, porque todos querían saber qué pasaba en la capital del país y quiénes estaban.

“Fue un gran momento para el comercio de imágenes, se vendían en tarjetas postales; en ese tiempo no hay televisión y el cine para trasmitir noticias todavía no es tan relevante, entonces la gente compra esas imágenes, compraba las fotografías de Carranza, de los diputados cuando visitaron el Cerro de las Campanas, las fotografías de todos los que llegaban, había álbumes que la gente coleccionaba”, dice la historiadora.

—¿Y quiénes son y dónde está el trabajo de los fotógrafos queretanos que estuvieron presentes en esa época en que se instaló en la ciudad el Congreso Constituyente?

La directora del Centro Queretano de la Imagen, Guadalupe Zárate Miguel, dice que no están. “No, no están, y la esperanza que yo tengo es que vamos a encontrarlas. En ese momento está Melitón Rodríguez, un fotógrafo muy activo, él hace postales y las vende. Hemos de seguir buscando, por ahí andan y seguramente se han reproducido mucho, sin darle crédito, porque muchas fotografías no tienen firma, ni siquiera iniciales del fotógrafo, así es más difícil. Los Casasola, de quien es el archivo más importante de la Revolución Mexicana y muchos aspectos de la vida nacional, se ponen como compiladores de estas fotografías y así es como ingresan a la Fototeca Nacional. Pero sí nos falta encontrar el trabajo de los fotógrafos locales, porque sin duda hubo, como hubo gente de todo el país, este evento es el primer acontecimiento histórico mexicano que queda consignado en fotografía”.

También hace falta encontrar más textos y memorias de los testigos de la época, de los queretanos que asistieron a las discusiones, en donde se permitía el acceso al público. “En las sesiones del Congreso había público, mucha gente y he de suponer que muchos de ellos eran residentes de la ciudad, hay algunas fotografías en que aparecen los espectadores, siguiendo los debates, yo confío en que iremos descubriendo algunas de esas imágenes”.

Otro tema que queda pendiente de investigar, es el trabajo de las fotógrafas que estuvieron presentes durante ese periodo histórico, porque sí había mujeres detrás de la cámara. “Tengo entendido que sí, que sí hubo mujeres, no entre los fotógrafos oficiales, en la fotografía del equipo se ve que son puros hombres, pero sí hubo mujeres tomando fotografías, ahí está otro tema por investigar”, agrega Guadalupe Zárate Miguel, quien próximamente presentará el libro Pioneros de la fotografía en Querétaro.

En esa tarea de rescate e investigación se encuentra trabajando el Centro Queretano de la Imagen, institución que depende de la ahora Secretaría de Cultura de Querétaro. El gran reto del Centro es reunir, preservar e investigar los acervos fotográficos del Estado de Querétaro, para tener a disposición de las nuevas generaciones la historia de la fotografía queretana.

Google News

TEMAS RELACIONADOS