El 20 de julio del presente año, el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) expuso ajustes y renovadas estrategias en el marco de la sesión extraordinaria del Consejo Nacional del partido guinda.

Destaca, en primer lugar, la creación de la Comisión Evaluadora de Incorporaciones a partir de la cual se analizará con lupa el perfil de la gente aspirante a militar en el partido, todo esto a partir de las contrariedades y escándalos de los casos: Miguel Ángel Yunes Márquez y Adán Augusto López Hernández, entre otros más.

La aspiración es evitar el fenómeno del “chapulineo” oportunista de personajes provenientes de partidos de oposición, ya que, sin duda, el caso particular del coordinador de la bancada de Morena en el Senado de la República ha cimbrado el edificio del poder político de la izquierda liderado por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum.

Aunque López Hernández aún no es culpable de nada, ya carga, desde ahora, con el estigma de su relación con un criminal. Hoy día, vale decir, la integridad en la política es la dimensión moral que engrandece a un político o lo destruye. Por lo pronto, La interpelación pública al caso apremia una solución creíble y transparente máxime si la vida política se desplaza en tiempos demasiado recortados.

El otro punto es el Plan Municipalista, el cual plantea un intenso trabajo de campo con los ciudadanos a partir de un activismo más firme de los 888 municipios en manos de Morena. Autoridades y ciudadanos revitalizarán el poderío del partido-movimiento desde la intensificación de la función municipal en rubros del bienestar social como son: agua, drenaje, pavimentación, alumbrado público, manejo de basura, recuperación de espacios públicos y seguridad. En todas las latitudes del país, esas son las demandas ciudadanas más apremiantes. Una vez más, Morena se adelanta a la oposición en su conjunto.

Ahora bien, en particular, los factores de riesgo para el PAN a nivel nacional. Ya sólo agrupa en su seno a 277 mil 665 militantes, mientras que Morena congrega a 7 millones. El riesgo de la extinción está en proceso. El blanquiazul se ha convertido en una junta de notables sin identidad y sin capacidad de acercarse a los ciudadanos porque no saben cómo hacerlo. Su estado de hemiplejia está a la vista. Su líder es un hombre teatral sin cultura política, el cual no comprende el mundo actual. Aquel PAN ganador del respeto de propios y extraños por ser el eterno oposicionista no cuenta, hoy día, con intelectuales orgánicos capaces de darle dirección política al partido. Por si faltara algo más, el resto de los partidos de oposición son, prácticamente, inexistentes. Así las cosas…

Lo antedicho permite el paso a pensar el caso del PAN en Querétaro. El partido enfrenta el dilema de si seguir el rumbo del PAN nacional o refundar su identidad de partido estatal, de arraigo queretano. El guiarse por una u otra opción implicará ganar o perder las elecciones políticas de 2027. Nada fácil la toma de decisión de riesgo en un ambiente de confusión y miopía política.

Director Fundador de CETESPO

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